El pasado mes de diciembre tuve la oportunidad, junto con mis compañeros, de realizar un viaje a Bruselas subvencionado por el vicepresidente del Parlamento Europeo, Ramón Luis Valcárcel Siso.
Los afortunados que pudimos ir superamos un proceso de selección que, personalmente, me sirvió y mucho para hacerme una idea de lo que más tarde conoceríamos de primera mano en Bruselas.
Como inicio de las pruebas, asistimos a un seminario dirigido por los profesores Adela Alija, Maria Goñi, Carlos López, Gracia Abad y Jordi Regí. Tras el seminario y después de haber realizado dos comentarios sobre la materia, nos enfrentamos a una prueba tipo test, para poner en práctica lo que habíamos aprendido. La prueba estuvo muy reñida pues nos presentamos muchos y no había plazas para todos.
Superadas las pruebas ya solo faltaba esperar al 9 de diciembre para irnos de viaje. Jordi Regí, responsable de la actividad y profesor de la asignatura de Derecho Comunitario nos acompañó, “obligándonos” a un madrugón monumental, pues el vuelo salía a las 6.00 de la mañana…
En Bruselas visitamos la oficina de la Comunidad de Madrid, la Comisión, el Parlamento Europeo y el Consejo de Ministros.
Este viaje ha supuesto para mí muchas cosas, pero principalmente, me quedo con la experiencia que supone el aprendizaje fuera de las aulas, esencial para afianzar el conocimiento que adquirimos en clase y que en muchas ocasiones no disponemos de la posibilidad que pueda realizarse. En este sentido, ver en la práctica y en el lugar todos los conocimientos adquiridos es algo que ayuda mucho a comprender mejor las realidades y, sin duda, interactuar escuchando o preguntando a profesionales o cargos electos que trabajan en esas instituciones es aun muchísimo más interesante.
Por otro lado, realizar un viaje de estas características, fomenta las relaciones entre compañeros, forjando una amistad que va más allá de las aulas y que nos ayuda para que en nuestro futuro profesional podamos gozar de un “networking” cada vez más necesario.
Además, en mi primer año en la Universidad Nebrija tenía el temor de no integrarme con mis compañeros, pero el fantástico ambiente que existe en las aulas y este viaje me han ayudado mucho para disipar ese temor. He podido conocerlos y vivir una experiencia difícil de olvidar.
Personalmente, ha sido un viaje muy enriquecedor. Conocer de primera mano las instituciones europeas, algo que desde aquí vemos tan “lejano” pero que nos afecta en la práctica totalidad de nuestras relaciones.
Pero además, poder realizar un viaje así con mis compañeros, con Jordi, nuestro profesor, que con tanta paciencia nos acompañó, ha sido realmente un viaje para recordar y parecerá un poco tópico, pero supimos compaginar conocimientos y buenos ratos, con ponencias de calidad.
Ha habido tiempo de risas y diversión y tiempo de aprender. ¡Ha sido, simplemente, genial!
¡Muchas Gracias por la experiencia!
Victoria Hernández Barrera
Estudiante del Grado en Derecho
