Anabel Ortiz Cañón es fundadora de la marca de diseño e ilustración Anabel Lee junto a su hermana Aurora. Licenciada en Bellas Artes y profesora de Educación Plástica en un instituto, decidió estudiar el Máster en Diseño Industrial con especialización en Diseño Digital y Animación en la Escuela Politécnica Superior y de Arquitectura de la Universidad Nebrija, lo que supuso un punto de inflexión para su forma de trabajar.
En esta entrevista conocemos más a fondo su proyecto de emprendimiento y las claves para ser emprendedor en este ámbito.
Te incorporaste a la Universidad Nebrija para realizar el Máster en Diseño Industrial con especialización en Diseño Digital y Animación ¿Qué carrera habías cursado anteriormente y qué te llevó a elegir nuestro máster?
Yo había estudiado Bellas Artes en la facultad del País Vasco. Después de estar trabajando durante 10 años como profesora de Educación Plástica en un instituto decidí que tenía que cambiar. Me había quedado obsoleta en muchos contenidos que eran necesarios para mi trabajo, sobre todo en cuanto las nuevas tecnologías, diseño digital, vídeo, etc. Así que lo organicé durante un año, pedí una excedencia en mi trabajo y busqué un máster que se adecuara a lo que necesitaba. Y di con el Máster en Diseño Industrial de la Universidad Nebrija.
¿Qué recuerdas con más afecto de tu año en Nebrija?
Del año que pasé en la Universidad Nebrija haciendo el máster me quedo con todo lo que aprendí y mi paso por Madrid que me dio un punto de vista diferente para ver las cosas renovadas.
Actualmente trabajas como ilustradora en Anabel Lee, un proyecto personal de emprendimiento junto a tu hermana. ¿Cómo ha sido el trayecto desde la finalización del máster hasta la fundación de Anabel Lee?
A mí siempre me ha gustado la ilustración. Siempre he estado dibujando. Antes de ir a estudiar el máster estuve durante un año pintando camisetas a mano, pintando murales, ilustrando para editoriales, etc. A la gente le gustaban los diseños, pero al empezar a estudiar el máster dejé aparcada un poco esa faceta. Al volver a Cantabria lo retomé y mi hermana Aurora me dio el empujón necesario para convertir algo tan artesano en algo más profesional.
Háblanos sobre Anabel Lee. ¿En qué consiste el proyecto?
Anabel Lee es el nombre de la marca. Comenzó siendo la forma en la que firmaba mis trabajos hace ya muchos años. Al empezar junto a mi hermana Aurora, Anabel Lee ha pasado a ser un equipo.
Anabel Lee es una marca de diseño e ilustración. Hemos lanzado nuestra propia línea de prendas en las que plasmamos nuestros diseños, principalmente camisetas y sudaderas. Ahora también nos hemos atrevido con algún vestido.
Además de la línea de ropa también está la parte de ilustración y de diseño mural. Esta es la parte más artística de la marca pero que hace que todo sea muy personal.
Estamos muy contentas porque después de trabajar duro durante 2 años vemos que Anabel Lee gusta y se extiende poco a poco. Ya tenemos 32 puntos de venta por toda España a parte de nuestra tienda online, www.anabel-lee.com. Nunca nos hubiéramos imaginado llegar hasta aquí.
Empezamos con muy poco dinero pero con mucha ilusión.
Tras tu experiencia como emprendedora,¿cuáles consideras que son las claves del éxito en éste ámbito?
Lo primero de todo es que creas en lo que haces y que te guste muchísimo, tanto que no te importe dedicarle horas en las que preferirías estar disfrutando del día, de los amigos o de otras aficiones, porque esto es una afición en sí.
Trabajar mucho, estar al tanto de las últimas tendencias, ver muchas revistas, blogs, webs, exposiciones, viajar…cualquier cosa que te aporte algo nuevo. Es un bagaje visual al que tienes que mimar cada día.
Otro punto importante es ir poco a poco, no marcarse grandes metas, sin prisa pero sin pausa. Y uno indispensable es que hay que prestar mucha atención a los detalles, a esas pequeñas cosas que te van a hacer diferente.
Y por supuesto, cuidar mucho las redes sociales.
¿Y cuáles las ventajas y desventajas de emprender un negocio de estas características?
La principal ventaja es un tópico, pero es que eres tu propio jefe. Tú te marcas tu horario, tu forma de trabajar.
Las desventajas, de momento no muchas, aunque por ejemplo hay bastantes horas en las que estás solo en el estudio, dibujando, contestando mails, poniendo al día papeles, etc, y eso te aleja de un entorno de trabajo con más gente en el que compartir experiencias.
¿Qué es lo que más te atrae de tu trabajo ahora?
No me puedo quedar con una sola pero una de las cosas que más me gustan es cuando comienza la tarde y sé que voy a tener muchas horas por delante para trabajar, sobre todo cuando estamos trabajando en algún diseño nuevo y vamos moldeándolo hasta dar con la imagen final.
¿Qué nuevos proyectos veremos en Anabel Lee?
Vamos poco a poco, así que no miramos más allá de un mes. Creamos diseños que son inmediatos. En este aspecto la moda ha cambiado mucho y nosotras nos hemos adaptado a ello. La gente una vez que empieza a seguirte quiere ver algo nuevo cada poco tiempo, así que no podemos bajar la guardia y tenemos que estar ideando cosas nuevas todos los días.
Lo más inmediato que tenemos en mente es crear una línea de calzado de cara al verano. Así que crucemos los dedos y que pronto la podáis disfrutar.
¿Qué recomendarías a los jóvenes que quieran formar parte del mundo de la ilustración?
Que estudien algo relacionado con el dibujo, ya sea Bellas Artes, Diseño, Cómic o Ilustración. Al final puedes llegar por caminos muy diversos. Lo importante es que te guste mucho lo que haces, no marcarte unas metas inalcanzables y no tirar la toalla. Ser constante y formarte todos los días, aprender de los profesionales, ver exposiciones, ir a talleres, practicar con diferentes técnicas.
Y siempre tener un plan B y uno C. ¿Que al director creativo de una editorial no le gustan tus dibujos? Pues los plasmas en otro soporte y sacas una colección de toallas. Y por supuesto, mucho humor.
Para finalizar, retomamos la Universidad, ¿Qué valores personales consideras que te llevaste de tu paso por Nebrija y en qué ocasión posterior los has visto aplicados?
Mi paso por la Universidad Nebrija me enseñó muchas cosas. Conocí a gente muy interesante, de la que aprendí mucho. Yo venía de Bellas Artes y estaba rodeada de Ingenieros de Diseño, Informáticos, que tenían otra visión de las cosas.
Aprendí a trabajar todos los días y a investigar mucho. Tuve asignaturas interesantes que me han servido para llevar a cabo mi proyecto.
Ese año fue un punto de inflexión para mi forma de trabajar.