“No hay mal que por bien no venga” afirma un dicho popular. Aunque no lo parezca, las situaciones de inactividad vital son parte del ciclo natural de actividad – inactividad que ha de sufrir toda persona a lo largo de su vida y que ayudan a reorientar y centrar objetivos, así como a reunir esfuerzos y adquirir recursos, tanto materiales como mentales, para afrontar nuevos y más complicados proyectos en el futuro.
Pero también pueden ser situaciones complicadas de afrontar. Son momentos que traen consigo épocas de incertidumbre y ansiedad ante la falta de estímulos o progresos a corto plazo. Estas situaciones son, por ejemplo, la vida inmediatamente después de terminar la carrera universitaria. O un periodo largo de desempleo debido a una baja de tipo laboral o médica. O como, por ejemplo, otro tipo de situaciones excepcionales como las que se están produciendo por la COVID-19.
Desde el Club Nebrija Alumni, tanto a través de este artículo como en futuros eventos, queremos proporcionarte ejemplos de actividades que puedes realizar en un periodo de inactividad para mejorar tanto tu perfil profesional como tu salud psicológica.
¡Grítalo a los cuatro vientos!
Sí, si estás en un periodo de inactividad no deseado y necesitas avanzar de nuevo en tu trayectoria profesional, el mejor consejo que podemos darte es: ¡Que se entere todo el mundo! Date de alta en el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) como persona en búsqueda activa de oportunidades laborales, aprovecha las ayudas y herramientas que se te brindan por estar en esta situación. Podrás formarte a menor coste y recibir otro tipo de ayudas y recursos como materiales para ello. Todos necesitamos a veces un empujón para volver a arrancar.
También, otra buena opción es comunicarlo en redes sociales profesionales, así como a amigos o familiares. No te podrán echar una mano si no saben que la necesitas. A veces, el parón puede durar menos tiempo del que esperamos si anunciamos a viva voz nuestro deseo de retomar la actividad.
Otra manera de anunciarlo, esta vez, a las empresas que te interesan es hacerles llegar tu currículum. Sí, puede parecer obvio, pero no es tan común enviar candidaturas espontáneas. No solo hay que enviar tu CV cuando se detecta una oferta de empleo, tienes que adelantarte a las próximas que puedan llegar y apuntar a las empresas que más te motiven en un futuro.
Recuerda, los cuatro vientos son: El SEPE, las redes sociales profesionales, los allegados o familiares y, por último, las candidaturas espontáneas a empresas.
La experiencia llega cuando no se necesita…pero mientras, ¡a buscarla!
La experiencia profesional no solo llega de la mano de un contrato laboral. Cualquier actividad que te ayude a mejorar tus competencias profesionales es una experiencia vinculada a tu desarrollo profesional. Existen muchas otras maneras de mejorar tu currículum para que luzca de cara a una incorporación al mercado.
Una manera de poder desempeñar y desarrollar actividades profesionales, así como de crear contactos y oportunidades, es a través de la realización de voluntariados o servicios civiles. Recuerda que esto has de realizarlo de manera desinteresada y dedicada. Esto te ayudará a desarrollar tanto competencias específicas como inespecíficas. Además, mejorará tu vida social, intelectual y te ayudará probablemente a sentirte realizado en algunos aspectos de tu vida. Lo ideal es que, para obtener beneficio recíproco, puedas participar en alguna actividad relacionada con tus habilidades o formación, buscando tú el tipo de voluntariado que más encaje con tu perfil y donde más puedas ayudar a la causa. No obstante, cualquier actividad de este tipo será beneficiosa tanto para ti como para la sociedad.
Are you really ready? ¡Oui! Dai!
Una de las competencias técnicas más valoradas por las empresas y que mejorarán tu vida cultural, social y profesional son los idiomas. Un periodo de inactividad es el momento perfecto para continuar mejorando nuestros conocimientos lingüísticos. Para ello, solo es necesario un dispositivo electrónico y conexión a internet.
No hace falta viajar todo un verano a otro país para poder aprender de manera eficiente un idioma. Lee y consume material audiovisual del idioma que te interese, escucha música, películas, conecta con alguien en RRSS que te pueda ayudar y con quien poder conversar, descarga esa APP de idiomas práctica… Todo esto te ayudará también a mejorar tus redes de contactos profesionales y no-profesionales, así como a brindarte oportunidades inesperadas, a acercarte a otros contextos y a ganar experiencias.
Lo que nos lleva al último punto. De la misma manera que solo necesitas estar online para aprender idiomas, o conectar con gente, o gritar a los cuatros vientos que estas en búsqueda de oportunidades, es imprescindible para todo ello que tengas un presencia activa y útil en internet.
Estoy en internet, luego existo
Es imprescindible en los tiempos que corren mostrarse activo en la red, sobre todo cuando se está en búsqueda activa de oportunidades. Además, internet es la herramienta para seguir formándote, el otro paso vital para salir de la inactividad: la formación continua.
Recapitulemos: Internet es esencial como herramienta, pero también como estrategia de éxito. Es necesario generar una buena marca personal en entornos digitales que te ayude a que te localicen, localizar, impactar, presentar tus proyectos a presentarte como profesional, para ser un altavoz de tu situación, para hacer contactos…en esencia, para casi todo.
Para ello, deberás saber cómo utilizar herramientas digitales. Así, internet es también medio y materia en la que formarte. Cualquier formación enfocada a mejorar tu capacidad de desenvolverte en los entornos digitales te hará posicionarte como un profesional más capacitado y actualizado, optimizando tus posibilidades de encontrar nuevos proyectos o herramientas y, si es tu fin, un empleo.
Todas estas herramientas son las que desarrollamos en el Club Nebrija Alumni a través de nuestras ventajas, formaciones o procesos de asesoramiento profesional. Esperamos que estos consejos y nuestras futuras actividades te ayuden a decir ¿Y ahora qué? ¡Ahora todo!
Cristina Aparicio Rodríguez, Club Alumni Nebrija