Los alumnos del Grado y Máster en Turismo de la Facultad de Ciencias Sociales pudieron asistir a un encuentro con profesionales de la Asociación de gestores de viajes de empresa en una interesante jornada de trabajo.
Desde las Asociación quisieron transmitir a los alumnos algunas de las habilidades que son necesarias para que los gestores de viajes, o travel managers, “mueven unos 900 millones de euros al año”, de ahí la importancia de algunas habilidades directivas que deben tener para gestionar su trabajo.
“El buen profesional es aquel que tiene equilibrada su mente y sus emociones para poder gestionar altas dosis de estrés”. Para enseñar estas habilidades, desde la Asociación hacen “jornadas de formación para enseñar estas habilidades a los equipos de travel managers”.
Estos profesionales, mueven grandes volúmenes de trabajo al gestionar viajes para grupos muy diversos con diferentes problemáticas. Por eso necesitan habilidades como la resiliencia, el pensamiento crítico, la gestión de la energía, la autonomía y habilidades sociales “porque es un trabajo que gestiona personas y sus emociones en ocasiones en circunstancias muy especiales”. “También enseñamos a manejar los conflictos interpersonales, entre departamentos. Hay que saber evitarlos, pero también abordarlos”.
Un gestor de viajes debe conocer las políticas de viaje, el control del gasto, habilidades de negociación, equilibrio y liderazgo y gestión con las agencias. Según la asociación es importante la anticipación y los planes b porque” no solo movemos personas, también es gestión de flotas y las necesidades técnicas que van a tener cuando lleguen al destino”.
La tecnología aplicada en los hoteles
“La tecnología es muy importante para nuestro sector y nuestra actividad.” En los últimos años, el incremento de las herramientas tecnologías ha sido notorio: “Sin las herramientas tecnológicas no podríamos trabajar porque ayudan a la automatización de procesos”. Esta tecnología puede reducir los costes hasta un 90%.
En hoteles, estandarizar la información, validar los datos, gestionar la base de datos de clientes y las transacciones se hace todavía manualmente, pero ya se puede hacer de forma automática gracias a la tecnología. “Se busca dar una interfaz al usuario corporativo que sepa lo que le gusta a ese usuario para que todo esté a su gusto cuando llegue y repita su estancia, gracias al big data”.
“Tenemos que tener un criterio para saber qué acciones y procesos se pueden automatizar y cuáles no. Dependerá del volumen de trabajo, de la propensión a errores, la alta predictibilidad… Con la tecnología aplicada a estos procesos se consigue disminuir los tiempos, mejorar la calidad de los servicios y la productividad, elevar la moral de los empleados y mejorar la visibilidad y precisión de los procesos”, explicaron desde la asociación.
Entre los próximos pasos que se dará con la tecnología se encuentran los robot–butlers, -que ya se usan en hoteles en Japón-, que son robots que conocen los gustos de los clientes y les atienden de forma personalizada. También impresoras 3D dentro de las habitaciones para construir algo que se le haya podido olvidar al cliente, un peine, un cepillo, o tecnología para dirigir el sueño del cliente y que sea más placentero…En resumen, control del ambiente de la habitación para hacer mejor y más personalizada la estancia en el hotel.









