Los VI Premios EDUCA ABANCA Mejor Docente de España 2022 han otorgado a Felipe García Gaitero la segunda posición en la categoría de Universidad. Desde 2017 imparte su docencia, entre otros centros, en la Universidad Nebrija. El profesor del Máster en Formación del Profesorado, Tecnología Educativa y Metodologías Docentes da clases de Pedagogía Digital y Mediada, Didáctica de la Informática, Matemáticas para profesores y Diseño de Modelos Metodológicos Híbridos. También es tutor académico prácticum y tutoriza Trabajos de Fin de Máster.
P: ¿Qué supone en lo personal y en lo profesional este premio?
R: En lo personal siento una alegría enorme, estoy muy feliz y contento. Llevo pocos años en el mundo de la docencia Universitaria y ni en mis mejores sueños hubiera imaginado llegar hasta este punto. En lo profesional supone un reconocimiento que indica que voy dando los pasos adecuados en el camino correcto. Este reconocimiento me impulsa a seguir mejorando y aprendiendo día tras día.
P: ¿Qué busca en sus alumnos?, ¿cómo es su forma de enseñar?
R: En mis alumnos busco personas, con emociones, con circunstancias personales e intereses de lo más variado, busco percibir la realidad como ellos lo hacen para ofrecerles aquello que necesitan. En lo que respecta a la forma de enseñar, lo primero que intento es ser coherente entre lo que digo, lo que hago y lo que transmito a mis alumnos. En clase fomento la participación, hago uso de muchos recursos tecnológicos y me gusta sorprender 😉.
P: ¿Cuáles serían los rasgos básicos que debería tener un docente según su opinión?
R: Vocación y pasión, son las dos claves para ser un buen docente y un buen profesional.
P: ¿Cuál es su primer recuerdo como alumno y profesor?
R: Si te refieres al ámbito universitario, los primeros recuerdos que tengo son negativos. Profesores fríos, distantes, lecciones magistrales que eran ininteligibles … Creo que todo aquello me marcó y por eso intento ser un ejemplo de todo lo contrario. Mi primera experiencia como profesor fue aquí, en Nebrija, institución a la que siempre agradeceré el haberme abierto las puertas siendo un profesor completamente lego en la materia. No me avergüenza decir que mis primeras clases fueron francamente malas y es que, tal y como decía mi abuela “Nadie nace sabiendo”. Sin error no hay aprendizaje pero lo más importante es tener ganas de avanzar y mejorar, aunque a veces nos cueste y nos resulte difícil.
P: ¿A quién le dedica el premio?
R: En primer lugar, a mi familia y a mi pareja, sin su apoyo incondicional nunca habría llegado a ser quien soy ni a estar donde estoy. Y por supuesto quiero dedicárselo a mis alumnos, todo mi entusiasmo y mi esfuerzo es para ellos.
Javier Picos / Foto: FGG