Docente apasionado, niño con un adulto dentro, domador de ritmos y sonidos… Daniel Pattier, profesor ayudante en la Facultad de Educación de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y creador del canal de YouTube Canta y Aprende (casi 50 000 suscriptores), apadrina con una conferencia la entrega de premios de la I Feria Virtual del Máster en Tecnología de la Información y la Comunicación para la Educación y Aprendizaje Digital de la Universidad Nebrija. Sus palabras, mareadas de tanto vaivén -el atril no va con él-, animan a sus colegas a usar más la música para mejorar el aprendizaje de sus alumnos.
Con un ejercicio práctico en el que el auditorio completa letras de canciones y villancicos de toda la vida, Pattier demuestra que “el poder de la música” provoca que “aunque hace años y meses que no escuchemos uno de estos temas”, los tengamos en la memoria sin necesidad de haber pasado por un proceso duro de asimilación, de sentarse e hincar los codos. “Imaginaos esto aplicado a las clases”, sugiere. Ahí radica la pedagogía musical, “un vehículo de aprendizaje” que sirve para todas las asignaturas.
Daniel Pattier, Premio Nacional Fin de Carrera, doctor en Educación, máster en Innovación e Investigación en Educación, máster en Digital Teaching and Learning, máster en Neurociencias para docentes y padre de familia numerosa, explica que encender la música en clase aporta luces y beneficios “de todo tipo” y evidencias científicas que corroboran el rendimiento académico y el desarrollo de la memoria desde la propia diversidad musical.
Para pone todo esto en práctica, el profesor ha de tener en cuenta la asignatura que imparte, la metodología que aplica (gamificación, aprendizaje colaborativo…), de cuánto tiempo dispone, la realidad sociocultural de su aula y qué contenido, competencia y valor quiere que aprendan sus alumnos.
Los pasos que tiene que dar el docente, según Pattier, se resumen en las siguientes acciones: elegir contenido, competencia o valor; investigar; escoger el tipo de canción que más convenga; decantarse por una canción ya creada o componerla ellos mismos; trabajar la canción con los estudiantes; grabar la canción; editar la grabación; y publicar el vídeo o el audio.
Los ríos fluyen mejor de esta forma
Guitarra en mano y con la ayuda de los coros del público, demuestra sus tesis con una de sus canciones más populares: Cómo aprender fácilmente los ríos de España. La cantinela de “El más grande, el Tajo; Guadiana debajo” permanece en nuestros cerebros como cualquier bombazo musical del verano.
Con esta idea de pedagogía musical, el profesor de la UCM defiende el uso de las TIC (Tecnologías de la Información y las Comunicaciones) desde la primera, segunda y tercera persona; es decir, usando herramientas ya creadas, otras “con pautas que doy pero cuya autoría no es mía” y las que implican el “yo me lo guiso y yo me lo como”.
Daniel Pattier recomienda algunas TIC de este segundo cajón:
ChatGPT, “una herramienta que ayuda mucho en la pedagogía musical”. Por ejemplo, “te crea una canción de los planetas para niños con la canción del Jingle Bells, en 27 segundos”.
MusicLM. “Escribes un texto y una idea y te crea una música; cuando ya esté asentada va a ser un pelotazo”.
Beatoven.ai. “Le das una serie de patrones y te devuelve una melodía; eliges el género y luego el estado de ánimo y te ofrece una canción libre de derechos”.
AIVA, “parecida a Beatoven.ai, pero con una edición más fácil”.
Si queremos hacer todo “en primera persona”, Pattier aconseja Audacity, GarageBand y Scarlett Studio.
“En los próximos meses va a haber un cambio de paradigma, ahora mismo ya se están desarrollando inteligencias artificiales para uso exclusivo de empresas privadas”, opina mientras ofrece a los docentes otra lista de herramientas de inteligencia artificial como Ecrett Music, Amper Music, MuseNet (Open AI), que “próximamente puede romper el mercado musical cuando todo el mundo pueda hacer canciones de calidad”.
Daniel Pattier es partidario del uso de la inteligencia artificial con sus ventajas (tiempo, posibilidades ilimitadas y originalidad), pero acompañadas de una “reflexión” sobre sus inconvenientes (despersonalización, derechos de autor, legislación, peor calidad y entrega de tus datos). “No os asustéis de la inteligencia artificial, pero, por favor, usad la música y su poder en vuestras clases”, concluye.
En el metaverso de Nebrija
Los profesores del Máster en Tecnología de la Información y la Comunicación para la Educación y Aprendizaje Digital de la Universidad Nebrija, después de las palabras de Daniel Pattier, celebra la entrega de premios de la I Feria Virtual, que se desarrolla en el metaverso y estará abierta hasta finales del mes de junio con acceso libre al público. En estos espacios virtuales están los trabajos mejor valorados de un total de 100 propuestas dirigidas a diferentes niveles que buscan mejorar el mundo educativo con recursos e inspiración.
El proyecto Somos increíbles -de Beatriz Rodríguez Berzosa, Francisco Javier Parra, Jaime Martínez García, Patricia Caballero y Patricia Gómez- resulta vencedor en la categoría de eProfessor: recursos que Inspiran. En el apartado de e-Innovation propuestas formación e intervención educativa el primer premio es para NOOC: el Peligro de las redes sociales, elaborado por Víctor Caamaño, Andrea Díez Valbuena, María Díaz Santín, Francisco Javier Farrona y Carlos García Llamas.
Por su parte, Miriam Lázaro, María Catalina Martín Albo, Natalia Naval, Pilar María Reyes y Julia Zamora se llevan el gato el agua en la categoría e-Creator: creaciones para la educación con su propuesta Breakout Edu: rescate en el universo animal.
En un acto moderado por el profesor Daniel Rodrigo, Nuria Camuñas, vicedecana de la Facultad de Lenguas y Educación, hace entrega de un reconocimiento a los miembros del Comité Organizador de los premios compuesto por María Beatriz Juárez, Claudia Liliana Gandía, José Javier Hueso, Ibán de la Horra, Daniel Rodrigo y Sulma Farfán, directora del Máster en TIC para la Educación y Aprendizaje Digital. Asimismo, hay un reconocimiento público a los profesores José María Jiménez, Miguel Lázaro, y Alién García, a los alumni y a los tutores de TFM, que integraron el comité evaluador. Empresas como Educaplay, Genially, y Devoteam también tienen su espacio en el apartado de agradecimientos.
“La eficiencia de la madurez”
A continuación, Susana Martín Leralta, decana de la Facultad de Lenguas y Educación, alega “la eficiencia de la madurez” de un máster que cumple seis años con una mejora “continua” que ha sido valorado como el segundo mejor de España en la categoría de Educación del “prestigioso” Ranking de El Mundo. “La gran preocupación es la tecnología y cómo influye en los procesos de aprendizaje y ese es un reto para los profesores”, dice la decana en su intervención.
El Máster en Tecnología de la Información y la Comunicación para la Educación y Aprendizaje Digital refuerza con la celebración de la I Feria Virtual su idea de compartir los recursos y propuestas educativas de sus profesores y alumnos dirigidas principalmente a infantil y primaria. “Haber usado el metaverso en nuestra propuesta es muy innovador puesto que permite a los visitantes de cualquier lugar del mundo acceder y ver lo que han hecho nuestros alumnos de forma muy realista”, comenta Sulma Farfán sobre una feria que “ha despertado un gran interés”.
Como cierre de un acto, que tiene lugar en la jornada de reflexión, previa a las elecciones autonómicas y locales, Farfán invita a los profesores “a ser transformadores de mentes, a poner alas a la educación, y a vivir la vida con ilusión” para que sus alumnos, “los navegantes del metaverso del mañana y nuestro legado” puedan utilizar la inteligencia artificial de forma “prudente”.
Texto: Javier Picos. Fotos: Zaida del Río.
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