De emociones y análisis estuvo compuesta la conferencia de Etel Ayvar, experta en la industria musical digital, cofundadora de Las Musas Music y mánager de artistas. Antes de adentrarse en la radiografía del sector, miró a los ojos a los alumnos de la Facultad de Comunicación y Artes y desplegó el mensaje esencial: “Muchas veces no somos conscientes de lo que la música provoca en nuestras vidas. Ese sentimiento de compartir, de amistad, de piel de gallina… eso nos enseña y nos muestra la música”.
Esta “ciudadana del mundo” nacida en Perú, pero desde los dos años radicada en Madrid, transitó después por la red de personas que está detrás de un tema musical y por los cambios de consumo y formato. El entorno ayuda. A su juicio, la industria de la música en España ha crecido en los últimos años, sigue dando pasos hacia su profesionalidad y es cada vez más demandada y reconocida fuera de nuestras fronteras, incluso los Grammy Latinos salen por primera vez de Estados Unidos para recalar en Andalucía.
Después de la presentación de la profesora e investigadora Rocío Gago, Ayvar enumeró las partes de la industria: editorial musical (music publishing, la figura que se encarga de gestionar los derechos de autor, “la más compleja y desconocida”), la discográfica (los propietarios de las grabaciones), el management (representantes, los gestores de la carrera del artista), distribuidoras, plataformas digitales, entidades de gestión y asociaciones.
En la misma línea, aconsejó a los estudiantes de la Universidad Nebrija especializarse en una de las ramas sin perder de vista una visión global. Los perfiles profesionales beben de múltiples disciplinas como la comunicación audiovisual, el periodismo, el marketing, la publicidad, el derecho, las relaciones públicas, el sonido o la iluminación. Lo interesante radica en que a medida que el artista “va creciendo, su equipo lo hace en la misma proporción” ya que se van incorporando asistentes, mánager de producto, road manager o promotores.
“Estar en todos los lados”
Para acceder al sector musical “hay que ser curioso, inquieto, estar en todos lados, formarte” sin olvidar asistir a eventos, conciertos, festivales y suscribirte a blogs. En este último apartado, Etel Ayvar recomendó Music Business World Wide, Industria Musical y Campus Las Musas. Las salidas laborales son múltiples: discográficas, promotoras, plataformas digitales, distribuidoras, agencias de booking, agencias de management, editoriales musicales, estudios de grabación, productoras audiovisuales, agencias de marketing, despachos de abogados, agencias de comunicación, asociaciones, festivales… “El abanico es muy amplio y no os olvidéis del mercado latinoamericano”, señaló.
La figura del productor musical es una de las que ha sufrido una mayor transformación situándose a la altura, en plataformas como Spotify, de los propios artistas, sin contar con que muchos de ellos compaginan esa labor con sus propios proyectos artísticos y la creación de una marca propia. La experta musical citó varios ejemplos de estos nuevos superproductores: Alizzz, Garabato, Oddliquor, Carlos Ares, Chanela Clicka, Pharrel Williams o Bizarrap.
Para Ayvar, resulta importante que estos productores musicales tengan equipos que les bajen a tierra y apelen a su humildad. En este ámbito, se lamentó de la falta de referentes femeninos, una circunstancia que sitúa a España a “años luz” de otros países. Alguna despunta como Vicco, célebre por su tema Nochentera que alcanzó la tercera posición en el pasado Benidorm Fest.
Cambiando de tercio, Etel Ayvar se refirió al sector “precario” de los videoclips, que no suelen dejar beneficio económico per se a los artistas y que en los últimos tiempos se ha diversificado en auténticas obras de arte más que “herramientas de consumo” -muchos de ellos parecen cortometrajes- y formatos más cortos y verticales para abaratar costes.
La figura del supervisor musical
La conferencia finalizó con un aviso para navegantes. En España hay pocos supervisores musicales, los profesionales que se encargan de sincronizar la música con las imágenes en series, películas y anuncios. Este desempeño, que requiere “talento y conocimientos audiovisuales y legales”, ha crecido de forma exponencial.
Por otro lado, Las Musas Music, de la que forma parte Etel Ayvar, y la Universidad Nebrija han suscrito un acuerdo de colaboración de prácticas académicas con la Universidad Nebrija para el desarrollo profesional de estudiantes del Major de Music Business (Estados Unidos), que cada primavera se animan a aprender español en el Centro de Estudios Hispánicos Nebrija.
Texto: Javier Picos. Fotos: Zaida del Río.