La segunda quincena de mayo se celebra la gran fiesta del cine francés, el Festival de Cannes. El Instituto de Lenguas Modernas (ILM) de la Universidad Nebrija ha querido unirse a la celebración y compartirla con los alumnos. Para celebrar la fiesta del cine francés, el ILM, de la mano de la profesora Ángeles Quevedo, organizó el Festival de films francophones, una actividad, en la que los participantes pudieron aprender y bucear por los clásicos del Séptimo Arte francés.
Fueron unas sesiones muy dinámicas. Para empezar, los participantes aprendieron vocabulario a través de un juego en la plataforma baamboozle. Después jugaron a un chasse au trèsor en la que los alumnos, divididos por equipos, tenían que ir contestando una cadena de preguntas sobre cine francés que se encontraban escondidas en unos huevos de juguete. Por último, asitieron a la exhibición de un par de cortos. Los alumnos disfrutaron mucho. Gracias a preguntas incorporadas en los vídeos, pudieron poner en práctica el vocabulario adquirido durante la sesión.
Historia del festival
En 1932, en pleno periodo de entreguerras, surgió en Venecia el primer festival internacional de cine (La Biennale di Venezia). Inglaterra, Francia, Estados Unidos, pero sobre todo, Italia y Alemania, aprovecharon para proyectar las obras realizadas por sus respectivas filmografías.
En aquel momento, eran las propias delegaciones de los países participantes las que realizaban la selección de las películas que se presentaban al festival. Dadas las circunstancias, tanto Mussolini como Hitler aprovecharon el festival para favorecer a las películas de origen italiano y alemán.
Por ejemplo, en 1938, las ganadoras del certamen fueron Olympia, de Leni Riefenstahl y Luciano Serra Pilota, de Goffedro Alessandrini. Competían con La gran ilusión de Jean Renoir que regresó a casa con las manos vacías.
Los franceses, que otra cosa no, pero para eso de defender lo suyo se las pintan solos, se marcharon indignados del festival. La política no podía dominar el mundo de la cultura de esa manera.
Fue entonces cuando un grupo de críticos y cineastas franceses se reunieron para pedir al gobierno francés que sufragase los gastos de un festival internacional de cine en Francia. Un festival en el que los filmes pudieran competir y ser vistos sin sesgos, ni represión política.
En aquel tiempo nadie se atrevía a hacer algo que pudiera molestar a Mussolini, pero el grupo resultó ser realmente persuasivo. Miembros como Philippe Erlanger, al frente de Action Artistique Française; Robert Favre Le Bret, la cara visible del festival durante 50 años; y uno de los padres del cine, Louis Lumière consiguieron que el 1 de septiembre de 1939 se inaugurara el Festival International du Film de Cannes, sólo cancelado un día después por el inicio de la Segunda Guerra Mundial.
El 20 de septiembre de 1946, un año después del fin de la II Guerra Mundial, comienzó la primera edición del festival de cine de Cannes, que, hasta 1951, se celebraría en el mes de septiembre (excepto en 1948 y 1950). Desde entonces a primavera es sinónimo de cine en Francia.