Valiosa e interesante jornada la que pudieron disfrutar nuestros compañeros del Máster en Vehículos de Competición y, junto a ellos, otros afortunados nombres de nuestro Club del Automóvil que no dudaron en acudir al evento. En Henakart se les presentó la oportunidad de disfrutar de las emociones del Karting y, a la vez, descubrir la anatomía de esta categoría mundial desde la perspectiva más ingenieril. El resultado fue el siguiente: (Click en título para más)
Casi 30 años de historia guardada a buen recaudo en Henakart, circuito de Karting madrileño localizado en San Fernando de Henares que abría sus puertas a nuestros compañeros más gustosos de esta disciplina. La jornada albergó un briefing con las mejores explicaciones sobre el sinuoso trazado y todo lo que iban a poder observar al sucederse las vueltas a bordo de distintos bólidos. La situación los remitió a la física más elemental, aquella que nos habla de aceleración normal como cociente entre el cuadrado de la velocidad y el radio de la curva tomada. Sin embargo, la realidad de una curva tomada a buen ritmo, dando con un radio suficiente que así lo permita, requiere también de condiciones favorables en los neumáticos del vehículo. Fue entonces cuando se pudo chequear la correcta presión de los mismos (alrededor de 0,7 bar) para después comprobar el efecto de la trayectoria seguida sobre la temperatura de las gomas. El constante análisis de este parámetro es una lección vital para dar con el máximo rendimiento en pista, como bien supieron los alumnos al recibir también información sobre los límites e instrumentos (manómetros) usados para regular dicha presión en el momento oportuno.
Con el transcurso de la mañana llegó la esperada hora de enfrentarse a la pista de competición, reafirmándose los estudiantes en la idea de la gran dificultad que supone encontrar una actividad capaz de equipararse con el Karting, una experiencia que desemboca en grandes emociones que van apareciendo a medida que aumenta la capacidad de exprimir la máquina. Ésta no era tarea fácil en el trazado madrileño, iniciándose la marcha con los monoplazas de alquiler de 390 cc para, minutos después, tener que lidiar con los PCR 125 y RÓTAX DD2, ligados directamente al mundo de la competición. El rápido suministro de potencia y un fugaz paso por curva despertaron furor y nervios entre los allí presentes, alumnos que pudieron empaparse de esta exclusiva adrenalina cuya fórmula o receta intentarían desgranar con ayuda de los datos extraídos de la controladora del kart (Mychron 5 con sensores de velocidad, temperatura, GPS…) y analizados posteriormente con el Software “Race Studio 2”, usado incluso en el Mundial de Resistencia. La experiencia de los más veteranos que pudieron darse cita en Henakart terminó de redondear una jornada muy notable, llena de momentos en los cuales los alumnos interiorizaron valiosos consejos del feroz mundo de la competición de una forma que combinaba la aplicación de los aspectos teóricos con la experimentación de su incuestionable valor en el mundo real, sintiendo en primera persona las prestaciones que la máquina es capaz de desarrollar en pista, inverosímiles y fascinantes en incontables ocasiones.