Tras doce convocatorias ininterrumpidas, el Certamen Literario de Relato Breve Alonso Zamora Vicente se ha convertido en todo un clásico de nuestra oferta cultural. La Universidad Nebrija ha vuelto a convocarlo y de nuevo se abre la puerta para que alumnos, docentes y personal de administración y servicios, podamos demostrar nuestra creatividad y optar por alguno de los premios con el que coronar nuestro éxito de literatos. Los premios oscilan de los 100 a los 1000 euros para las categorías universitarias, e incluyen reconocimientos como la publicación y otras prebendas de mano de los colaboradores y patrocinadores de esta aventura literaria, así que no hay que razón para no animarse a participar.
Sin embargo, el mejor premio es, sin duda, el de entregar un texto terminado que ha salido de nuestra mano, de nuestra inventiva y de las influencias que todos hemos ido acumulando a lo largo de años de lectura, cinefilia, impresiones y reflexiones que van dejando su poso ahí, en el espacio interior de donde luego las retomamos un buen día, para decir algo, para reflejar nuestros pensamientos y pareceres, nuestras dudas y temores, nuestras emociones, en un pedazo de papel o en una pantallita, con vocación de decirnos algo a nosotros mismos, pero también a los demás.
Y para eso nació el Certamen Literario de Relato Breve Alonso Zamora Vicente: para fomentar la producción literaria y el interés por la lectura –un doble objetivo del que siempre se hace eco este certamen– y para sacar del fondo de nosotros mismos toda esa experiencia de vida, de creación y de lectura que clama por hacerse un sitio, aunque sea pequeñito de momento, entre nuestras expectativas y metas.
Así que no hay excusa, si hemos sentido alguna vez el pinchazo de la escritura creativa, para volcar nuestra inspiración en unas pocas páginas –como mínimo hay que presentar 2 y como máximo 8– y presentarte a los distintos premios de la modalidad relato, o acaso y apenas en unas 250 palabras para presentarse a los premios de las modalidades microrrelato o microrrelato preuniversitario. Eso sí, como los premios son muy diversos y están dirigidos a distintos perfiles de nuestros futuros escritores, conviene echar un buen vistazo a las bases para asegurarnos de que nos presentamos al premio que se ajusta a nuestras circunstancias. Nada más fácil que bajarse las bases desde esta dirección:
http://biblioteca.nebrija.es/cgi-bin/opac?HELPID=unne0033
La temática es de libre elección para casi todos los premios, así que podemos dejar volar la imaginación y escribir sobre lo que más nos inquieta: ¡este es un ejercicio libre! pero eso sí, como reto añadido se impone una pequeña o gran condición –según se mire– que nos obliga a incluir en los textos que se presenten a los premios asociados a la modalidad relato la expresión Universidad Nebrija. En fin: imaginación al poder y buenas componendas.
Todos a por el XII Certamen Literario de Relato Breve y el reconocimiento creativo: tenemos de plazo hasta el 26 de febrero (inclusive) así que no hay tiempo que perder. Mucha suerte y a por ello.
Rafael Jiménez
Servicio de Biblioteca