En el mundo digitalizado en el que vivimos, todos nosotros, en mayor o menor medida, hemos tenido que adaptar o cambiar nuestros hábitos básicos de trabajo, comunicación, interacción y búsqueda de información. En concreto, los docentes, también debemos “actualizarnos” y subirnos al tren de la digitalización, fundamentalmente para hacer que la escuela no quede rezagada y evolucione al mismo ritmo que las demás áreas de la sociedad.
Muchos profesores intentan que sus clases resulten modernas y atractivas para el estudiante, pero se limitan a hacer lo de siempre, aunque, eso sí, con un formato diferente. Evidentemente estos cambios no afectan al proceso de enseñanza-aprendizaje en absoluto y la gran mayoría de las clases siguen siendo iguales que hace años, pero, por ejemplo, en vez de utilizar una transparencia, ponen una PPT, o en vez de entregar una fotocopia con el típico ejercicio de huecos, lo proyectan y completan con una pizarra digital. Diríamos, desde el saber popular, que “es el mismo perro con distinto collar”.
Por otra parte, el docente muchas veces se siente abrumado por el exceso de programas, herramientas, software educativo, gadgets y aplicaciones que hay en el mercado para “facilitarle” la labor del día a día en el aula y le resulta imposible aprender lo que cada vez llega más y más rápidamente, produciendo, en muchas ocasiones, una ansiedad y complejo de inferioridad considerables.
En mi caso, creo que intento con más o menos éxito, diferenciar “lo que está de moda” de “lo que me conviene”. Me explico:
Soy una persona al corriente de los avances del mundo tecnológico y las TIC forman parte de mi vida diaria. Sin embargo, sigo utilizando la pizarra de rotulador, cuadernos de papel y las tarjetitas de siempre, al lado de herramientas de autor como Constructor o Cuadernia, software como Camtasia o Aumentaty Author, programas como Powtoon o Adobe Presenter, cuadernos digitales como Moleskine Smart Writing Set. La cuestión principal es que no debemos usar estos medios sin una justificación real y auténtica, sin que aporten realmente algo distinto al aula, al alumno y, por supuesto, a su aprendizaje.
Por eso hoy voy a hablar brevemente de la Moleskine Smart Writing Set, un conjunto de elementos que, según podemos leer en la página de Moleskine:
«…is a system made up of three objects – the special Paper Tablet notebook, the smart Pen+ and a companion App – that enable you to digitally edit and share what you create on paper in real-time without taking a photo, uploading files, or scanning documents».
Y el video explicativo lo podemos ver aquí.
“¡Parece cosa de brujería!”, que diría María Barranco en la famosa película de Almodóvar, ¿no es cierto?
Pues aquí tengo mi set de Moleskine, que ya he utilizado para realizar una actividad sobre las frases hechas relacionadas con el cuerpo humano:
El paquete se compone de una libreta digital y una pluma que se carga con un cable de móvil:
¿Y cómo funciona?
En primer lugar, hay que descargar en el móvil la app que necesitas para sincronizarlo con la pluma y la libreta mediante bluetooth. La app se llama Neo notes y la puedes descargar para Apple o para Android.
Después debemos sincronizar la pluma y la app, con lo cual mientras vamos escribiendo o dibujando en la libreta, esos trazos se ven en el teléfono (o tablet) al mismo tiempo:
Libreta y móvil, respectivamente.
Puedes cambiar el color de los trazos, moverlos, etc. y después enviarlo por email o compartirlo en redes sociales o con tu propio ordenador:
Opción de compartir: teléfono y libreta, respectivamente.
¿Y cómo podríamos utilizar la Moleskine en nuestras clases? Aquí van algunas ideas:
- Hacer cuadros o esquemas.
- Tomar notas a mano, que digitalizaremos después.
- Crear imágenes propias, sin el consabido miedo a los derechos de autor.
- Formar grupos de trabajo y enviarnos documentos al instante.
- Enviar tareas a los estudiantes.
- Compartir trabajos o imágenes en redes sociales.
- Diseñar y dejar volar la imaginación.
En próximas entradas os contaré mis experiencias con la Moleskine…¡el futuro está aquí!
Paz Bartolomé
Profesora del Centro de Estudios Hispánicos
¡¡¡Fantastico post Paz Bartolomé!!!!
Ya se está pensando en GCN solicitar uno para el departamento.
Enhorabuena por tu creatividad, curiosidad y buen hacer como docente, ¡¡los alumnos siempre serán los beneficiados!!
Nunca paramos de aprender gracias a aportaciones como las vuestras.
Hola Paz,
Me ha encantado el post y la herramienta, ¡estoy pensando en comprarme una! es muy útil, seguro que le podría dar mucho uso en el trabajo.
Mil gracias por compartir
Un abrazo,
¡¡Muchas gracias Paz por contar tu experiencia!
Me ha gustado mucho tu idea de «tecnología sí, pero que sea útil» y por lo he podido leer esta herramienta es muy útil para tu día a día como docente y seguro que tu experiencia animará a otros docentes a usarla.
Saludos,
Muchas gracias, Paz, por presentarnos esta herramienta y compartirnos tu experiencia. ¡Me encanta!
Muy buena idea Paz. Como siempre, enseñándonos nuevas herramientas. Habrá que probarlo.
Querida Paz.
De verdad que parece cosa de brujería! Pero lo has explicado tan bien que me entran muchas ganas de probarlo y hacerme un poco la bruja. 😉
Gracias por compartir esos recursos! Había algunos que no los conocía y me ha encantado ampliar conocimientos. 🙂
¡Me encanta! Gracias Paz, siempre a la última. 🙂