Buenas prácticas

Buenas prácticas docentes y apoyo tecnopedagógico de Global Campus

Hablar de «buenas prácticas», no siempre es fácil…

Como toda buena receta, debe reunir una serie de ingredientes que combine una pizca de innovación y modernización junto con unos objetivos definidos y coherentes con el fin que se persigue. Además, si añadimos los procedimientos apropiados, ya sean nuevos o que presenten una mejora en los ya existentes, solo necesitaremos el toque final agregando un poco de creatividad, motivación e ilusión. 

El docente debe ser consciente y planificar muy bien cómo llevará a cabo su actividad, sin olvidar que esta práctica debe responder a una necesidad concreta y, en última instancia, ser un hecho evidenciable. El resultado será la transformación de nuestra labor docente en un proceso activo, eficaz y de aprendizaje positivo para nuestro alumnado. 

Definiremos “buena práctica” como aquella propuesta que promueve aprendizajes diversos a través de la integración de conceptos, procedimientos y actitudes, generando experiencias educativas significativas. 

Por lo tanto, podríamos decir que una buena práctica se caracterizaría por lo siguiente: 

  • Ejemplifica un proceso de reestructuración educativa: organización, espacios, tiempos, metodologías y relaciones con el alumnado. 
  • Prioriza la centralidad del alumnado a través de metodologías activas y personalizadas. 
  • Apuesta por el aprendizaje por proyectos, por la transversalidad y por la interdisciplinaridad. 
  • Practica una evaluación formativa con retroalimentación constante al alumnado. 
  • Desafía la organización de tiempos y espacios fomentando el trabajo en equipo. 
  • Impulsa la participación activa de todos los implicados. 
  • Crea un clima afectivo y emocional positivo. 
  • Cuenta con un profesorado reflexivo, colaborativo formando redes de continuo aprendizaje. 

La docencia debe estar en continuo proceso de reflexión y redefinición que nos permita emplear metodologías y habilidades adaptadas a las necesidades y exigencias sociales actuales en las que las soft skills del alumnado tales como la creatividad, pensamiento crítico, toma de decisiones, etc. juegan un papel de especial relevancia a día de hoy.  

Para ello, es necesario prestarse a un constante reciclaje que ayude a repensar las estrategias empleadas en la práctica, así como al desarrollo las competencias que nos ayudarán a desempeñar una docencia de calidad. 

En  el marco de la guía metodológica de enseñanza y para el aprendizaje de GCN, destacamos como pilar fundamental la importancia de la innovación pedagógica a partir de la renovación de los métodos tradicionales e integración de las mejores prácticas docentes.

El contexto educativo actual puede facilitar el camino a la innovación gracias a la inclusión de la tecnología siempre y cuando exista un diseño coherente y organizado siendo el profesor el mediador en todo el proceso. Si no es así, la integración tecnológica -por muy novedosa que sea- puede tender a un modelo anclado en la pedagogía de la transmisión. Por ello, desde Global Campus Nebrija se apuesta por la formación de cara a trabajar y mejorar en nuevas formas de enseñar y aprender, nuevas concepciones pedagógicas y metodológicas.

En definitiva, innovación y formación son dos elementos necesarios para lograr el cambio; esta retroalimentación es mutua y su objetivo principal es lograr una transformación y el desarrollo y mejora de la praxis docente.

Es por ello, que os invitamos a realizar un ejercicio de introspección y como docentes comprometidos con la investigación y la educación, os planteamos las siguientes preguntas o cuestiones: 

  • ¿Cuál es mi concepto de buenas prácticas? 
  • ¿Es lo mismo una buena práctica que una buena enseñanza? 
  • ¿Crees que es necesario el uso de nuevos recursos para desarrollar buenas prácticas? ¿Usar una nueva herramienta conlleva en sí mismo una buena práctica?
  • ¿Qué estrategia debo seguir para analizarlas e investigarlas? 
  • ¿Cuál es la importancia de estudiar, desarrollar y difundir las buenas prácticas? 
  • ¿Cuál es la efectividad y resultados de las buenas practicas? ¿Qué cambios o mejoras se han obtenido? 

Pero cualquier receta estaría incompleta sin un buen emplatado y una buena presentación. 

Zabalza en uno de sus trabajos destaca que el estudio y visibilización de las buenas prácticas docentes constituye uno de los principales compromisos dentro la investigación educativa (Shulman, 1986).  

Por lo tanto, la transferibilidad en las «buenas prácticas educativas» es un requisito básico. De hecho, uno de los rasgos fundamentales que cita la UNESCO al referenciar las buenas prácticas es la replicabilidad, es decir, que sirvan como modelo para desarrollar iniciativas de la misma índole (no solo a nivel interno sino extensibles a otras instituciones o a otras etapas educativas). 

Desde esta óptica, en la Universidad Nebrija, el departamento Global Campus Nebrija (GCN) celebra desde el año 2018 el Smart Campus, congreso que recoge la esencia de las buenas prácticas realizadas por nuestros profesores, dando visibilidad a todas ellas. Estas jornadas celebradas a lo largo de dos días presentan las distintas experiencias previamente evaluadas y seleccionadas por un comité para su difusión en nuestra comunidad educativa.  

Como se ha comentado al principio, hablar de buenas prácticas no era fácil, pero esperamos que a través de este post hayan quedado más claros los términos y conceptos claves en relación a su significado e implementación. 

Ahora os lanzamos el reto de llevarlas a cabo: ¿qué buena práctica implantarás en tu asignatura? ¿Te animarías a participar en la próxima edición del Smart Campus

¡Cuéntanos tus ideas y te ayudaremos en lo que necesites! 

Ana Rosa Rosado Parra

Gestora Educación Digital

Mario Gómez Gómez

Gestor Educación Digital

Palabras claves: buenas prácticas, enseñanza universitaria, innovación docente, práctica docente, evaluación, calidad docente. 


eLearning concept

Metodologías activas y herramientas digitales para un aprendizaje efectivo en entornos virtuales

La necesidad de una transformación eficiente en el ámbito educativo ha supuesto una preocupación global desde que a principios de siglo se establecieron las competencias como principios rectores de los sistemas educativos, en sustitución a los contenidos (OCDE, 2005). Desde entonces todos los países, a nivel mundial se han esforzado por alcanzar la consecución de las, tan nombradas, competencias no sin la dificultad añadida de una sociedad que demandaba unas competencias digitales y una alfabetización diferente para su ciudadanía (Pérez-Escoda, 2019). El e-learning, como modalidad de enseñanza innovadora se ha desarrollado durante dos décadas como alternativa a la enseñanza presencial descubriendo a la educación una alternativa donde el aprendizaje se ha flexibilizado hasta adecuarse totalmente a las necesidades del usuario con el u-learning o el m-learning como complemento, donde la enseñanza ha encontrado nuevos espacios en el ámbito digital (UNESCO, 2020).

Desde una perspectiva educativa, la pandemia por Covid-19 ha supuesto un coadyuvante, a nivel mundial, en la necesidad de usar el entorno digital como única alternativa a la educación ante una situación de encierro global sin precedentes. Organizaciones internacionales (OCDE, IEA, UNESCO, UIT), marcos de referencia (Unión Europea), y desde luego instituciones educativas (educación obligatoria y superior) se centran en repensar la educación para los espacios online, cuya eficiencia pasa, más que nunca, por el uso eficiente de herramientas digitales y el desarrollo de las competencias adecuadas, pero, también y, con igual importancia, por el diseño didáctico de las metodologías oportunas que nada tienen que ver con clases magistrales (que en muchos casos ha supuesto la solución de urgencia como muestran estudios recientes, Tejedor et al., 2021).

Ante esta situación de dificultad para tantos docentes y centros es interesante plantear un itinerario de acción eficiente que pase de la reflexión a la acción teniendo en cuenta todos los aspectos. El Itinerario DMT (Diagnóstico-Metodología-Tecnología o Diagnostic-Methology-Technology) (Pérez-Escoda, 2021) para un aprendizaje efectivo (e-learning o presencial) desde el punto de vista didáctico, propone tres momentos para ayudar a docentes y centros a afrontar la situación de modo eficiente.

Imagen 1: Condicionantes contextuales en el diagnóstico de nuestro contexto educativo. Fuente: Ana Pérez Escoda.

Diagnóstico del problema. En este primer momento es importante ser consciente de: a) los condicionantes contextuales (Imagen 1) que definen el entorno educativo de los alumnos, b) las teorías del aprendizaje, que resultarán fundamentales a los docentes para entender cómo aprenden los alumnos en el siglo XXI (Orientación Andujar), c) el cambio en el paradigma educativo (Imagen 2) y d) las competencias digitales (DigCompEdu).

Imagen 2: Cambio de paradigma educativo. Fuente: Ana Pérez Escoda.

Alternativas metodológicas. En este segundo momento es necesario el conocimiento profundo, por parte del docente, de las metodologías activas en toda su variedad, entendiendo que comparten una serie de características comunes: rol activo del alumno, implican colaboración en el trabajo, desarrollan el pensamiento crítico, fomentan las competencias digitales, se basan en el aprendizaje productivo, parten de la creatividad y motivación, y se evalúan de manera formativa y flexible. La Imagen 3 muestra este abanico de posibilidades metodológicas.

Imagen 3: Metodologías activas. Fuente: Ana Pérez Escoda.

Elección de las tecnologías adecuadas. Las herramientas digitales son potentes aliados de la enseñanza del siglo XXI siempre y cuando el docente tenga un conocimiento y dominio adecuado de estas. La mera sustitución o el uso sin un diseño didáctico y metodológico suponen, sin duda, una ausencia de efectividad en el propósito que nos ocupa: mejorar la enseñanza y hacer que el alumnado aprenda más y mejor. Como se observa en la Imagen 4, contemplamos cuatro tipos de herramientas digitales –que complementarán la metodología elegida– con el fin de hacer un uso educativo de las TIC en el aula: 1) los entornos personales de aprendizaje (PLN) (Maritxel Viñas), 2) la curación de contenido para el desarrollo de buenas prácticas en red, el docente puede convertirse en “content curator” para enseñar a sus alumnos; 3) tecnologías emergentes, como la robótica, la programación, la impresión 3D. o los simuladores; y 4) herramientas digitales de todo tipo: para blogging (Blogger, WordPress, Weebly, Wix), microblogging y posteo (Twitter, Tumblr),  creación de contenido (GoogleSites, Google Slides, Canva, Genially, Picktochart, Emaze) o para compartir contenido (Padlet, GoogleDrive, Scoop.it, Symbaloo).

Imagen 4: Herramientas digitales adecuadas. Fuente: Ana Pérez Escoda.

La consecución de este Itinerario DMT supone garantizar un diseño didáctico ajustado a nuestras necesidades –cada docente las suyas– y velar por un uso eficiente y eficaz de las herramientas digitales, ajustándolas a un propósito educativo garantizado por la metodología activa elegida.

Dra. Ana Pérez Escoda

@aperezescoda

¡Aprendamos de formas diferentes! La evaluación por pares en la enseñanza a distancia

Autor: Jordi Regi

 

 

Llevo muchos años en la docencia tanto presencial como a distancia y como escribí en el post ¡La pasión por enseñar nunca muere y la del profesor a distancia aún menos!, me considero un “profesor apasionado”. Me apasiona (valga la redundancia) la docencia, mis estudiantes y el aprendizaje por descubrimiento. En mi recorrido personal cada día intento aprender algo nuevo que, de algún modo, mejore mis clases haciéndolas más amenas, ilustrativas e incluso diferentes respecto del año anterior.

La innovación docente ha sido una constante en mi manera de entender el aprendizaje colectivo. Desde siempre he intentado que mis alumnos descubran la materia mediante herramientas y recursos que fueran complementarios al estudio dentro de las aulas. Así, desde hace ya más de 7 años, coordino un viaje de estudio donde un grupo de alumnos tiene la oportunidad de conocer personalmente las instituciones de la Unión Europea en Bruselas gracias a una subvención del Parlamento Europeo. Al alumnado preseleccionado para participar se le aporta una formación específica y se realiza una simulación de Consejo Europeo, de forma que pueda luego sacar el mayor partido posible. Ese proceso formativo adicional nos sirve para poder seleccionar a los alumnos que podrán ir al viaje de entre los muchos que se presentan, ya que no tenemos plazas para todos. De esta manera, se complementa una formación tanto dentro como fuera de las aulas en algo tan apasionante para mí como es el Derecho de la Unión Europea. 😊

Pero ese tema lo dejaremos para otro post, hoy quiero contaros lo que he hecho durante el curso pasado en mi asignatura de “Derecho Comunitario” en el Máster en Acceso a la Abogacía a distancia, titulación que tengo el orgullo de dirigir. ¡Una de mis experiencias de aprendizaje colaborativo en online!

Como miembro del Proyecto de Innovación Docente DREAM-TIC de Global Campus Nebrija estuve reflexionando sobre cómo mejorar y llevar la innovación a entornos digitales y que a su vez, el alumnado a distancia sintiera ese apoyo y esa cercanía en su aprendizaje haciéndoles partícipes del mismo. Fruto de esas sinergias y de las líneas de colaboración con la gestora del programa Patricia Ibañez, decidimos iniciar una serie de mejoras aplicables tanto al conjunto del máster, como a las diferentes asignaturas, que sirviesen para aumentar su calidad. Estas propuestas se tradujeron en actividades en las que queríamos despertar la curiosidad y las ganas de seguir aprendiendo del alumnado y del profesorado y, en concreto, en mi asignatura, mediante una fórmula muy conocida en el ámbito de la investigación y del mundo docente: la evaluación por pares.

Sin duda, la necesidad de que el alumno se implicara en el aprendizaje y, sobre todo, que además participara de él mediante un trabajo colaborativo, suponía un reto que debía acercar e implicar a los alumnos a distancia como si trabajaran en el mismo espacio físico. Para ello, debíamos empezar mediante el cuidadoso diseño de la actividad a realizar, que, como no podía ser de otro modo en el caso del Derecho de la UE, pasaba por ser una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea. ¡El reto estaba servido! A partir de ahí se trataba de identificar una sentencia que tuviera una interpretación conflictiva y que a la vez fuera “como una cebolla”, con capas y capas de aprendizaje de conceptos de la materia. Por ejemplo, empezando por la libre circulación de mercancías y sus excepciones, continuando con los incumplimientos de los Estados miembros, graves deficiencias procesales, arbitrariedad de la Comisión Europea, déficit democrático de las instituciones de la UE, grupos de presión… En fin no se podía pedir mucho más… Bueno, sí… que el que escribe estas líneas hubiera sido parte del equipo de defensa del Reino de España y que en ella existiera un conocimiento del caso enorme y de todo lo contable e incontable sobre esa situación.

El caso era algo tan sencillo como la denegación de entrada de un producto al mercado español por publicidad engañosa y protección de los consumidores. ¡Fácil! ¿Verdad?

Fruto de mi propuesta el alumnado debía leer la mencionada sentencia y elaborar un análisis/dictamen de la misma que debía subirse al campus virtual en el plazo de una 1 semana y media desde el comienzo de la asignatura, utilizando en este caso la “evaluación por pares” de nuestra plataforma Blackboard Learn. A partir de ahí, ¡la suerte estaba echada! Ahora les tocaba el turno de ponerse en el rol del “profe”, ¿cuántas veces hemos escuchado frases como “ojalá pudiera calificarme o me gustaría hacer propuestas…”?  Los alumnos recibirían, finalizado el plazo dos dictámenes anónimos de sus compañeros que deberían valorar y comentar de acuerdo con lo aprendido de manera objetiva y pasada una semana subir esas valoraciones y calificaciones a la plataforma. Además, para enriquecer este trabajo y aumentar el aprendizaje, se les pedía que argumentasen la valoración que otorgaban.

En resumen, parece simple y sencillo igual que cuando alguna vez habíamos hecho en nuestras clases de corregir el examen de otro compañero, eso sí, ahora se trababa de intentar valorar, aprender, comprender y enseñar a tus compañeros. Todo ello sin duda en una titulación como el Máster en acceso a la Abogacía, título habilitante para el acceso a la profesión de abogado.

Este ha sido un maravilloso reto que los alumnos han apreciado mucho y que cuando nos vemos en los exámenes presenciales o a través de los mails siempre me siguen pidiendo más información de la clasificada como “incontable” y además han estado encantados de poder aprender con las tecnologías.

¡Se abren las apuestas de nuevo! ¿Quién da más?

¡¡¡Aprendamos innovando sin parar!!!

 

Jordi Regi

Director del Máster Universitario en Acceso a la Abogacía

Buenas prácticas del curso 2016/17

Autora: Mª Teresa Ruiz

 

El pasado jueves 13 de julio tuvo lugar en el campus de Princesa la sesión formativa sobre buenas prácticas del profesorado de Global Campus durante el curso 2016/17. Aunque algunos de los profesores invitados a esta sesión no pudieron acudir el jueves (seguro que nos presentan sus propuestas innovadoras en otra ocasión), tuvimos el placer de contar con cuatro magníficas docentes. Compartimos con todos vosotros su visión innovadora, original e inspiradora:

 

Marta González: Estructuración de contenidos

Es el primer año de esta profesora impartiendo enseñanza online, pero lejos de suponerle una barrera, Marta considera Blackboard como una herramienta a la que se le puede sacar un gran partido, incluso para las titulaciones de formación presencial, pues ve un gran potencial en dicha herramienta.

No obstante, Marta comenta los retos ante los que se encontró al enfrentarse a esta nueva realidad: La enseñanza online:

 

RETO 1: Se encuentra en un contexto nuevo y se da cuenta de que, puesto que el escenario donde se produce el proceso de enseñanza-aprendizaje cambia, el método debe cambiar también, esto es, ser adaptado y secuenciar el contenido. Sostiene que “lo que vale en presencial no vale en online”, por ello entra en la fase de repensar su realidad docente, elabora contenido extra a modo de “caminito de migas” para que sus alumnos siempre se encuentren situados, se pone en la piel de su alumnado.

 

RETO 2Con afirmaciones como:

  • “Que crezca la asignatura y mis alumnos con ella”
  • “Dar vida a la asignatura, que no sea un mero contenido, que sea significativo”
  • “Picar a mis alumnos a que quieran saber más”
  • “Que vean que los contenidos están unidos unos con otros”
  • “Atrapar al alumno en el campus virtual”

 Marta expone el reto de romper la barrera tecnológica y motivar al alumnado.

 

RETO 3: Ponerse en la piel del alumnado. Hay que entender las limitaciones del alumnado (ya sean tecnológicas, de contenido, de disposición) pero no aceptarlas, pues eso nos frenaría. Hay que aceptarlas para crear mecanismos para superarlos.

 

RETO 4: Visualizar la meta, para ello hay que contar con:

  • Capacidad de innovación:
    • Mejorar lo existente mediante metodologías dinámicas.
  • Paciencia/motivación:
    • Necesaria la empatía con el alumno y el positivismo para romper la barrera tecnológica.
  • Efectividad:
    • Cumplir objetivos así como hacer un uso adecuado de los recursos, pues facilitan la vida.
    • Organización/sistematización
    • Flexibilidad/colaboración
  • Sentido realista:
    • Viabilidad, pues evitará frustraciones innecesarias

Imagen: Marta González durante la sesión de buenas prácticas. Fuente: GCN.

 

Rebeca Iglesias: Gamificación

Rebeca nos sorprendió a todos mostrándonos su metodología de insignias y logros integrada en Blackboard. Ella es gamer y expone que la Universidad tiene mucho que aprender de los videojuegos. Alude a las mecánicas adictivas de juego e integra esta adicción  en el proceso E-A utilizando la gamificación en su asignatura, basándose en estas premisas:

  • Recolección
  • Puntos/logros
  • Comparativas y clasificaciones
  • Niveles
  • Feedback

Con el objetivo de dinamizar la participación del alumnado y su implicación en las actividades planteadas a través del campus virtual, hace de su asignatura un videojuego desde el momento en que sus alumnos cuentan con la motivación de ganar algo.

Imagen: Rebeca Iglesias durante la sesión de buenas prácticas. Fuente: GCN.

 

Su asignatura está ambientada en Harry Potter. Rebeca hace lo siguiente:

  • Divide a los alumnos en cuatro casas
  • Propone normas e instrucciones
  • Enfoca sus actividades dentro de esta dinámica
  • Ofrece recompensas a quienes logran mayor puntuación

Esta forma de impartir su asignatura ha tenido una gran aceptación entre sus alumnos y nos ha servido para observar y admirar un caso real de gamificación en nuestras aulas virtuales.

 

Ana Otto: Evaluación formativa o para el aprendizaje

Ana se centra en la evaluación formativa made easyExpone que si bien el proceso de enseñanza-aprendizaje es un área en la que se innova, no ocurre lo mismo en cuanto a la evaluación. Es decir, es importante valorar la evaluación formativa en contraposición de la evaluación sumativa, en la cual se valora el aprendizaje final o la suma del aprendizaje al final de un periodo. Sin embargo, la evaluación formativa o para el aprendizaje:

  • Está integrada en la práctica docente y se manifiesta a través de instrumentos de evaluación que promueven la reflexión. Ej. Portfolio para observar nuestra trayectoria durante el curso.
  • Evaluación entendida como feedback
  • Es una evaluación no punitiva, esto es, no se penaliza el error, si no que se aprende de él y se dan nuevas oportunidades para enmendarlo.

 

Como ejemplo, la profesora utiliza la herramienta de evaluación por pares, da a conocer su rúbrica de evaluación para que los alumnos corrijan las pruebas de sus compañeros en base a ésta y así se cubre una doble finalidad:

  • Los alumnos conocen los criterios de la profesora a alcanzar.
  • Son capaces de identificar errores.

 

Imagen: Ana Otto durante la sesión de buenas prácticas. Fuente: GCN.

 

Vanessa P. Moreno: Flipped Classroom

Vanessa nos habla de la metodología “Flipped Classroom”. Y la pone en marcha a través de una herramienta tan sencilla como el foro del campus virtual de Blackboard o, simplemente, destinando tiempo al final de sus clases a través de Blackboard Collaborate, para que sus alumnos colaboren, reflexionen y debatan conjuntamente distintas temáticas. La profesora propone un tema a cada alumno/a, sobre el que tendrán que reflexionar, bien sea de manera escrita o verbal (foro, Bb Collaborate).

 

Imagen: Vanessa Moreno durante la sesión de buenas prácticas. Fuente: GCN.

 

Vanessa, a través de este modelo innovador, descubre que los alumnos colaboran más y no solo eso, si no que de manera más organizada, reflexiva y significativa. Si bien apunta que para que esta metodología sea efectiva, es imprescindible crear un clima de seguridad y confianza, esto es, fomentar la seguridad psicológica del alumnado.

 

De nuevo ha sido un placer seguir aprendiendo a enseñar, a motivar y a enamorar a nuestros alumnos a través de una formación tan rigurosa como atractiva. Agradecemos a estas cuatro excelentes profesoras que hayan compartido su experiencia con todos nosotros pero, sobre todo, les agradecemos su pasión por enseñar y por entregar a los alumnos en cada sesión una buena dosis de pasión y conocimiento. Es un placer poder aprender cada día de las mejores.

Seguiremos compartiendo con todos vosotros las buenas prácticas docentes de Global Campus, que cada vez son más gracias a la dedicación, cariño y profesionalidad de nuestros profesores.

 

Mª Teresa Ruiz

Gestora elearning de Global Campus

Diploma de especialización en elearning

e-Learning: «A system of learning which uses electronic media, typically over the Internet«,

Oxford Learner’s Dictionary.

 

Si convertimos esta definición en un sumatorio, podríamos decir:

e-Learning = Metodología + tecnología + innovación +

aprendizaje colaborativo + estrategia + recursos + herramientas +

competencias digitales + aprendizaje adaptativo +

narrativa + transmedia…

 

La complejidad es evidente, ¿verdad? Esta es la realidad a la que se enfrentan los docentes online. No basta con dominar una materia. No es suficiente con saber comunicar. Hay una gran cantidad de factores que se convierten en requisitos necesarios para destacar en la docencia en entornos digitales.

En Global Campus hemos desgranado esa fórmula para ofrecer una solución a cada uno de los retos que plantea la formación online y el resultado es el Diploma de especialización en elearning. Basado en la metodología que se ha convertido en el sello inequívoco de nuestro modelo, y con un enfoque muy práctico, este programa de 30 créditos ECTS te permitirá desarrollar el criterio, la capacidad de análisis y las competencias necesarias para optimizar el uso de la metodología y la tecnología en entornos digitales.

Es una excelente oportunidad para dominar el elearning. ¡Atrévete a dar el salto!

 

Global Campus Nebrija

Curso e-Teacher: Cómo ser un maestro del elearning

En unas semanas comienza la segunda edición del e-Teacher, un programa concebido, diseñado y monitorizado por Global Campus Nebrija e impartido por un excelente profesional del ámbito docente y empresarial, Justo Hidalgo. CEO y cofundador de 24symbols, Justo se ha formado en universidades tan prestigiosas como Stanford y Berkeley. Con una larga e innovadora trayectoria como profesor y emprendedor, plantea el curso como un verdadero producto digital.

La primera edición contó con 82 de nuestros profesores. El feedback del curso fue tan positivo, tanto por parte del profesor como por parte de alumnos (Gloria Zarzuelo o Fernando Díez), que no podíamos renunciar a esta segunda entrega.

Este curso responde a una necesidad de comprensión metodológica (incluso conceptual) del elearning, de una adaptación al entorno digital, del dominio de herramientas y recursos que aportan un gran valor en la docencia online y de una visión crítica, constructiva e innovadora del proceso de enseñanza-aprendizaje virtual. En definitiva, queremos ayudar a excelentes profesores presenciales a que lo sean también en nuestro elemento.

Si eres un@ enamorad@ de la docencia online y quieres adquirir competencias digitales, conocer nuevas tendencias educativas, desarrollar un sentido crítico e innovador y utilizar nuevos recursos y herramientas, sin duda disfrutarás del e-Teacher. Y lo harás con una metodología muy práctica y con la correspondiente tutorización y dinamización por parte del profesor.

Si quieres más información, echa un vistazo. ¡Te esperamos!

 

Global Campus Nebrija

 

    

 

Buenas prácticas docentes en Global Campus (III)

Son muchas las buenas prácticas de nuestros profesores durante el pasado curso 15/16. Queremos reconocer y agradecer el esfuerzo de todos ellos para innovar en sus clases y marcar la diferencia en cada una de sus asignaturas. Es un placer trabajar con excelentes profesionales que dan sentido a nuestro modelo de enseñanza-aprendizaje.

Os animamos a seguir creciendo, probando, equivocándoos las veces que sea necesario para acertar tanto como lo estáis haciendo. ¡Seguid así!

Además de los casos ya comentados en post anteriores, no queremos dejar pasar la ocasión sin exponer brevemente otras buenas prácticas del curso pasado:

  • Clara Martín: Destaca la estructura de sus cursos
  • José Antonio Tejedor: Utiliza multitud de recursos, no sólo textuales
  • Esther Moñivas: Incluye bibliografías seleccionadas de manera muy visual
  • Susana Llorián: Utiliza ppt locutados a través de Vimeo (a partir de ahora, se podrá hacer en Kaltura, la herramienta de gestión de vídeos integrada en Blackboard Learn)
  • Justo Hidalgo: Profesor innovador donde los haya, en esta ocasión queremos destacar sus nuncios a los alumnos; claros, cercanos, rigurosos y aportan una información muy completa a los estudiantes
  • Gerardo Quintana y Daniel Ruiz: En ambos casos cabe subrayar sus casos prácticos y actividades
  • Marta Plumed: Se caracteriza por la cercanía y disponibilidad con los alumnos, además del orden de los contenidos y foros y de saber sacarle mucho partido a las videoconferencias

Estos magníficos profesores y otros muchos, aportan un gran valor diferencial a nuestros programas y son inspiración para todos nosotros, que aprendemos cada día de los mejores profesionales.

Desde Global Campus, seguiremos dando el soporte necesario para tecnología, innovación y formación conformen un cóctel perfecto.

Sin duda, todo vuestro esfuerzo #MereceLaPena.

 

Global Campus Nebrija

 

De la docencia analógica al universo digital

A María López y Eduardo Vázquez

Ser un buen profesor en  la educación en línea es uno de los retos que tengo pendientes. La digitalización, el cambio del paradigma de la cultura analógica a la digital ha llegado al “performing” del aula. La clase, marcada por la explicación magistral, ha dejado de ser un “art vivant” como refieren los franceses a las artes escénicas para ser otra cosa.  No hay miradas entre el profesor y los alumnos: algo básico en la socialización y en el aprendizaje. Lo sustituimos por un chat síncrono y porque algún alumno que ha conectado correctamente el micro se le oye desde el otro lado y a veces te interpela. También por otras herramientas que trato de incorporar a mi exiguo repertorio en cada clase.  El cambiar de contexto la clase  y pasar de ser artesana a ser industrial (se graba, se puede distribuir por todo el mundo;  me recuerda a la diferencias entre arte e industria cultural) te deja en un estado de cierta vulnerabilidad. También las primeras experiencias que tienes como docente en línea te marcan –como todo en la vida–. Recuerdo no sé si la primera o de las primeras clases en entorno Blackboard con una clase italianos muy numerosa, que hablaban poco español y que uno de los tantos que había por ahí detrás se dedicó a taparme las diapositivas de los power point con grandes rectángulos negros que ocupaban toda la zona de visión de la diapositiva. Era un sábado a última hora de la tarde. Estaba solo en el Campus de Dehesa de la Villa con un conserje en la entrada. Los italianos chillándose unos a otros para identificar al alumno que me/nos estaba boicoteando la clase y…. en fin, imposible de gestionar aquel batiburrillo en línea.  Claro, eso marca. También si a la hora de hacer unos test los tenías que hacer en una hoja Excel que no se transformaban bien en Dokeos si tenía un acento o si ponías una palabra que no se convertía, en fin, paciencia que es la madre de la ciencia.

La resilencia es fundamental para ser docente hoy, pero no es posible la resilencia sin tener apoyos para seguir afrontando el reto de ser un buen docente en el entorno digital. Los problemas tecnológicos siguen existiendo: en la clase de ayer, sin ir más lejos, la conexión se perdió en cuatro ocasiones, el sistema expulsaba a los alumnos que entraban y salían de la plataforma a un ritmo vertiginoso y que se quejaban a través del chat. Antes de ayer me pasó lo mismo cuando en una actividad por grupos les expulsaba de los grupos y yo les volvía a integrar, pero claro, era imposible en una clase de 50 saber quién estaba antes en qué grupo. La semana pasada, la conversión que tengo que hacer en .mp4 de la grabación para un alumno que no puede asistir y que no lo puede visualizar si no es a través de dicho formato  se perdió porque ¡¡¡en teoría la clase duraba 18 horas!!! Luego comprobé que no, que la clase duraba 2 horas cuando la visualicé de nuevo con María López (de Global Campus) y que estaba seguro de haberle dado a grabar y a parar la grabar adecuadamente al comienzo y al final de la clase.

Decía que la resilencia no es posible sin apoyos. Aquí quiero dedicar esta entrada al blog de Global Campus a María López y a Eduardo (E-Learning Media). Son ellos los que están en el backstage de la clase en línea. Siempre pendientes de todo vaya bien, de llamarles en cualquier momento y que me atiendan para resolver el problema que tenga. Eso no se ve. Los que están fuera del escenario en las artes escénicas son tan importantes en la misma medida casi de los no aparecen en la escena. Por eso quiero dedicar este post a María y Eduardo. Ellos contribuyen de manera decisiva a que poco a poco me sienta más seguro y pueda  ser mejor docente en línea y a ellos va dedicado este escrito.

 

Juan Arturo Rubio Arostegui

Algunas reflexiones sobre el uso de las TIC en ELE, desde la neurolingüística

Desde la perspectiva neurolingüística, el uso de las TIC en el aula, es un estímulo positivo que contribuye a la variedad o a la sorpresa. Esto provoca en el cerebro del alumno una producción de dopamina que es la responsable de ciertas actitudes de nuestros alumnos como lo son la atención, la motivación, la disposición para participar en clase, para colaborar en grupos, para trabajar en parejas, entre otras más.

Como docentes de ELE, nos vemos perseguidos por ese fantasma que es la atención del alumno ¿cómo lograr mantener la atención de nuestros alumnos, cómo motivarlos, cómo satisfacer sus necesidades? Y una vez que lo hemos conseguido nos surgen más preguntas como ¿lograrán nuestros alumnos retener lo aprendido? Y son estos, entre otros cuestionamientos, los que nos llevan a usar las TIC en el aula de ELE por ser una herramienta que nos permite una posibilidad inmensa de recursos, tales como videos, canciones, ejercicios interactivos, hacer descargas a dispositivos electrónicos, crear cursos en entornos virtuales, realizar evaluaciones, entre otras posibilidades más.

Sin embargo, a pesar de todo lo que se ha dicho sobre las TIC los resultados obtenidos mediante su uso no son siempre halagadores y nos preguntamos por qué. ¿Por qué si por todos lados se proclaman las maravillas de las TIC a mí no me funcionan como se supone deberían hacerlo? No hay una sola respuesta pero, sí la certeza de que un mejor conocimiento sobre lo que produce el uso de las TIC en el cerebro de nuestros alumnos, nos puede ayudar a ello.

Por esta razón, en este post abordamos este tema desde la neurolingüística; disciplina de la lingüística aplicada, que estudia el cerebro humano y que nos permite tener una visión más completa de cómo se produce el proceso neurocognitivo que hace posible el aprendizaje.

El post del profesor Guillermo Filippone sobre la “Construcción de confianza en entornos online” ha hecho ya, una primera aproximación a los estudios neurocientíficos sobre la importancia de las emociones y ha mencionado el papel de la amígdala. Por ello en este post hablaremos de las amígdalas que, junto con el hipocampo son responsables, entre otras cosas, de la atención de nuestros alumnos en clase y de la fijación de los conocimientos.

La neurolingüística reconoce que el aprendizaje se produce por la construcción de una red asociativa de conocimientos mediante la conexión de un grupo de neuronas y que es mediante la práctica de las actividades y la repetición como se provocan una serie de estímulos cerebrales de los cuales depende la memorización a corto o a largo plazo.

Esta nueva red de conocimientos se almacena en la corteza cerebral atendiendo, además, a las competencias del alumno. La importancia de dicha corteza radica, en que es la naturaleza biológica del lexicón mental, lo que desde la psicolingüística se define como el lugar donde reside el conocimiento. Esta corteza está formada por neuronas o células neuronales, las cuales se conectan con otras mediante un proceso denominado sinapsis y transmiten impulsos (señales) al sistema nervioso, la transmisión, conocida también como reverberación, se produce mediante sustancias químicas llamadas neurotransmisores, siendo uno de ellos, la dopamina.

Sin embargo, hay un paso previo a esas conexiones, puesto que, para que la información que recibamos llegue al córtex, esta, tiene que pasar por unos filtros que influyen para ese almacenamiento, pudiendo esos filtros, incluso, bloquear ese paso. Esto se explica de la siguiente manera:

Nuestro cerebro, está expuesto a un caudal enorme de información pero, para procesarla, debe seleccionar la que le interesa y es ahí donde intervienen dos órganos internos cerebrales: las amígdalas (tenemos una en cada hemisferio cerebral) y el hipocampo, que actúan como guardianes para proteger al cerebro de una sobrecarga de información. La amígdala funciona como una alarma que le indica al cerebro cómo debe reaccionar y el hipocampo es el que regula las emociones, ambos trabajan conjuntamente y juegan un papel importante en la formación de la memoria (Fuster, J., 2010).

Siguiendo este proceso, una vez que las amígdalas y el hipocampo han seleccionado la información que pasará al córtex y no ha habido emociones negativas que bloqueen la introducción al cerebro de esa información, lo que sucede a continuación es una producción de dopamina que es realizada por estos mismos órganos. ¿Y por qué es importante la dopamina? Porque de acuerdo a las investigaciones neurolingüísticas, la dopamina es un elemento indispensable en el aprendizaje, ya que sin ella, las sinapsis no serán fuertes y los conocimientos no perdurarán, es decir, sin una producción suficiente de dopamina, nuestros alumnos olvidarán lo aprendido.

Pero además, la dopamina es responsable de otros factores importantísimos en el aula, Willis (2015) señala que, en el aprendizaje, la dopamina provoca placer, curiosidad, atención y motivación. Y no solo eso, la dopamina influye también, en los impulsos que recibe nuestro cerebro relacionados, por ejemplo, con el movimiento, disfrutar música, la disposición para tener sentido del humor u optimismo o, dicho de otra manera, esta es la razón por la cual podemos captar o no, la atención de nuestros alumnos o porque ciertas actividades funcionan muy bien con un grupo y con otro no.

Para producir dopamina entran en juego las emociones positivas, las cuales se pueden producir mediante el uso de recursos como canciones, videos, actividades lúdicas, el uso de imágenes o colores en los ejercicios/ actividades que presentamos al alumno y, en general, con toda actividad que rompa la monotonía en el aula y que provoque curiosidad en el cerebro de nuestros alumnos y es aquí donde, desde la neurolingüística, se reconoce el papel de las TIC en el aula.

Las TIC contribuyen a la novedad, la cual favorece la atención porque activa la curiosidad que es un rasgo natural en los seres humanos e implica una emoción positiva (Waelti, Dickinson y Schultz, 2001). Sin embargo, el docente debe ser consciente de cómo utilizar estas herramientas, determinar cuáles se adaptan mejor a sus alumnos y cuándo es conveniente usarlas, no olvidando que, provocar ocasiones que den oportunidad al alumno de practicar lo aprendido fuera del aula, favorecerá la reflexión, el trabajo autónomo y la creatividad (Willis, 2015) y, que lo monótono y rutinario, aun cuando sean actividades elaboradas con las TIC, no producirá suficiente dopamina y conseguirá el efecto contrario al que deseamos, es decir, aburrir al cerebro.

Por lo anterior, podemos considerar que las TIC son, indudablemente, una gran herramienta para el docente y que, usadas de manera responsable, conscientes de nuestro papel de facilitadores de conocimientos, nos sirven para apoyar al alumno en su aprendizaje contribuyendo con ello a su autonomía. Sin dejar a un lado, el hecho de que, su uso implica la capacitación del docente y de todas las personas involucradas, bien sean administradores, gestores o tutores, para conseguir que su aplicación en el aula genere emociones positivas y no caer en la rutina.

No olvidemos que es lo novedoso, la variedad, la sorpresa y no lo rutinario, lo que activa la curiosidad en el cerebro de nuestros alumnos y produce más dopamina y… a mayor producción de dopamina, mejor actitud de nuestros alumnos, mejor fijación de conocimientos, mejor disposición para el trabajo colaborativo y muchos otros beneficios para el proceso enseñanza-aprendizaje.

 

Laura Guzmán

Laura Olivia Guzmán Suasnávar

Profesora de español como lengua extranjera

Máster en lingüística aplicada a la enseñanza de ELE

 

Educación, calidad y retos actuales

La escuela es una institución esencial en cualquier sociedad democrática, fundamento de la misma y promotora de la elevación cultural y el desarrollo integral de las personas que la conforman. Sin embargo, este logro histórico debe re-construirse y adaptarse a las nuevas realidades y requerimientos que las sociedades presentan. No contemplar esta necesidad de renovación constante puede generar el distanciamiento, e incluso el no cumplimiento de las altas expectativas que la sociedad deposita en ella.

La velocidad de los procesos que configuran nuestras sociedades demanda con urgencia la creación de una escuela diferente. Una nueva cultura y contexto escolar que promueva la posibilidad en los estudiantes de ejercer de forma dinámica, crítica e integral el desarrollo de todas sus capacidades y potencialidades, no la mera respuesta mecánica a problemas desconectados de la realidad.

El modelo de escuela tradicional alberga evidentes dificultades para responder con acierto los retos actuales. Es un modelo estancado en los requerimientos propios de la Revolución industrial que no promueve el desarrollo integral de las capacidades de los alumnos. Por ello, debe ser superado a través de una fundamentación teórica sólida y el ejemplo de prácticas metodológicas de reconocida calidad. La dinámica educativa necesita modificar en profundidad las categorías problemáticas desde la que es interpretada y entendida, es decir, volver a preguntarnos como sociedad, en el caso que algún día se haya planteado: ¿qué función socio-educativa cumple la escuela?, ¿para qué educar?, ¿qué objetivos se debe plantear?, ¿qué retos enfrenta?…

Esta nueva escuela requiere la conformación de profesionales con una mirada pedagógica plural y una gran amplitud metodológica. Educadores que, de forma coherente, reflexiva, factible, coordinada y sinérgica, impulsen una respuesta socio-educativa sólida y adaptada. Por consiguiente, estoy hablando de formación permanente, de asumir nuestro papel de eternos aprendices, de construir un profesor-investigador conocedor de los últimos avances en pedagogía, de integridad y ética profesional, de actitud y predisposición, de ilusión, de trabajo, de revisión metodológica, y por último, de absoluta conciencia por parte del profesor sobre la envergadura de la labor que desempeña. Asimismo, estoy poniendo de manifiesto la necesidad de generar las condiciones políticas, administrativas y económicas adecuadas que permitan al educador desarrollar lo anterior de forma creativa y reflexiva, sin temor a ir en contra de la inercia.

Deben darse los requisitos para que los educadores experimenten y mejoren en su tarea profesional, es decir, el centro entendido como un lugar donde: yo como educador aprendo, ya que se crean las condiciones organizativas para que pueda seguir investigando, reflexionando, innovando y enriqueciendo mi labor. Hace tiempo que sabemos que los educadores mejoran su práctica cuando reflexionan sobre la misma, cuando someten a discusión sus postulados y contrastan con otros las importantes y variadas funciones que cotidianamente deben realizar: dinamizar contextos, organizar y secuenciar contenidos, seleccionar tareas, adecuar tiempos y espacios, identificar y transformar situaciones de desventaja, reflexionar sobre la consecución de objetivos, etc.

Para terminar, conviene recordar que no se está sugiriendo tener más pizarras digitales en el aula o disponer de mejores computadoras (pese a que bien venido son). Si los nuevos medios tecnológicos se utilizan desde un acentuado tradicionalismo pedagógico, acientífico y carente de reflexión metodológica, no estaremos cambiando nada. Se habla de re-apasionar lo elemental, aunque parezca modesto. Reivindicar uno de los trabajos más difíciles, importantes y apasionantes. Una labor, la del profesor, que debe ser realizada lentamente, con tacto e ilusión, compartida, creativa, reflexiva, cómplice, mantenida en el tiempo… Tal como señala el Informe McKinsey: “La calidad de un sistema educativo tiene como techo la calidad de sus docentes”. Ninguna institución educativa será mejor que la calidad y la ilusión de sus docentes.

 

Francisco Javier Pericacho Gómez

Universidad Antonio de Nebrija

Dpto. Educación