El Proyecto Nebrija to Dakar surge con el propósito de transformar este desafío deportivo en una experiencia educativa y tecnológica.
Se trata de un proyecto universitario real en el que los estudiantes son los protagonistas y desempeñan un papel fundamental en el rediseño y mejora tecnológica del modelo BV2 de Sodicars Racing.
Es un proyecto a largo plazo con una clara hoja de ruta, con el objetivo de posicionar a Nebrija-Sodicars como líder en tecnología, innovación y sostenibilidad.
Durante el primer año, el Proyecto Nebrija to Dakar supuso un reto en términos de ingeniería y organización, ya que el equipo se enfrentó a diversas dificultades durante el desarrollo de las mejoras tecnológicas y la configuración del vehículo BV2. Después de ocho intensos meses de trabajo, la estructura Nebrija-Sodicars logró llegar al Dakar con un equipo compuesto por más de 15 personas, incluyendo a cinco estudiantes de la propia universidad.
Aunque durante la participación en el Dakar surgieron varios problemas mecánicos que nos impidieron completar la carrera, la satisfacción personal de ver el prototipo desarrollado por nuestra estructura compitiendo en Arabia ha sido inmensa.
En el segundo año del proyecto Nebrija to Dakar, nuestro objetivo era consolidar los valores fundamentales del proyecto: trabajo, esfuerzo y actitud. Esto se llevaría a cabo a través de dos líneas de trabajo claras. En primer lugar, se buscaría implementar nuevas mejoras en el vehículo y, en segundo lugar, participaríamos en diversas pruebas nacionales e internacionales con el fin de acumular kilómetros y prepararnos para el próximo Dakar en 2024.
Sin embargo, durante una de esas pruebas, el automóvil sufrió una fuga de aceite que provocó un incendio en el motor, dejando el vehículo completamente calcinado. Debido a esto, nuestro segundo año se ha convertido en una carrera contrarreloj en la que estamos inmersos para llegar al próximo Dakar 2024.