Exposición 2018: Estado liminal

19 De forma directa e indirecta, los artistas seleccionados para esta exposición han explorado estas cuestiones desde diferentes perspectivas. Mario Espliego (Gua- dalajara, 1983) se acerca al tema a través de la revolución soviética, una época convulsa y agitada que supuso un complejo período de cambio. Esta instalación se divide en tres fragmentos. En primer lugar, se refleja la creación y destrucción de la figura del héroe mediante la proyección de la cabeza de David. Un segundo fragmento trata sobre las radios de Gustav Klutsis (1895 – 1938), creadas en el al- bor de la Revolución Rusa con fines propagandísticos. Por último, trece bustos de Lenin aluden a las miles de esculturas ejecutadas tras la muerte del líder soviético, el cual había manifestado en vida un rechazo hacia los monumentos personalis- tas. Cabe destacar que esta obra, titulada Rito de Paso (2018), se ha realizado ex profeso para la presente exposición. Espliego es doctor en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid, por lo que ha impartido numerosas con- ferencias y talleres. Por otro lado, ha realizado muestras individuales como en el MACBA de Barcelona o en el Museo Arhem ubicado en los Países Bajos, entre otros espacios. Asimismo, ha ganado numerosas becas y premios tanto naciona- les como internacionales. A través de la performance , valiéndose de su cuerpo y de un intermitente juego de luz y oscuridad, Irene Cantero (Sevilla, 1985) conjuga danza e instalación para explorar «aquello que se sale de la norma, lo no domesticado, lo que se ex- presa libremente, lo que comprende realidades heterogéneas». La pieza indaga en ese lugar límite donde todo se expone sin disfraz. El título, Be you still (2017), proviene del poema To my heart, bidding it have no Fear (1899) del escritor Wi- lliam Butler Yeats (1865-1939), puesto que contiene todos los conceptos con los que la artista trabaja: presencia, insistencia, compromiso y resistencia. En su recorrido artístico, destaca la obtención de becas de creación e investigación como la Beca Danceweb-Impulstanz de Viena o la beca para la Real Academia de España en Roma (RAER). Asimismo, ha participado en el programa de artis- tas en residencia de La Casa Encendida y del Centro de Arte Dos de Mayo. Por otra parte, Cantero se implica de forma activa en diferentes proyectos con el fin de investigar la anatomía humana, la danza desde la transdisciplinaridad y la resistencia y la luz. Fito Conesa (Cartagena, 1980) compone una oda a la adolescencia, quizá el estado liminal por antonomasia, donde un coro de jóvenes voces masculinas cantan al unísono. La obra es un registro de una pieza musical sin palabras, donde sólo se interpretan diferentes sonidos que remontan a una suerte de espacio transitorio, entre el presente y el pasado. En definitiva, una obra de- dicada al estado liminal de la voz y la pubertad, donde los sujetos en plena