Nuestra NEBRIJA 26 - Julio 2018

dietas, métodos adelgazantes milagrosos. Todos tienen algo en común: ni son eficaces, ni son seguros”. Por eso la reco- mendación unánime es, por un lado, el sentido común y, por otro, la consulta a especialistas si se quiere, en serio, hacer una dieta para perder peso. Si no, comer poco de todo, más ve- getal y menos animal. Una de palabras que acom- paña habitualmente a estos productos es “ciencia”. Por lo tanto, es una buena medida desconfiar de productos ali- menticios poco habituales que lleven ese apellido, con o sin justicia. Sin tener que recurrir a esa palabra, la alimentación hoy es mejor que nunca en la historia y se suma a todas las características que hacen que la esperanza de vida se haya incrementado en todos los lu- gares de la Tierra. De hecho, según el historiador Yuval Noah Harari, el hambre ha dejado de ser uno de los problemas de la humanidad. Tal y como escribe en su libro Homo Deus , “en la mayor parte del plane- ta, aunque una perso- na pierda el trabajo y todas sus posesiones, es improbable que muera de hambre. Seguros privados, entidades guberna- mentales y ONG internaciona- les quizá no la rescaten de la pobreza, pero le proporciona- rán suficientes calorías diarias para que sobreviva. De hecho, actualmente, en la mayoría de los países, comer en exceso se ha convertido en un problema mucho peor que el hambre”. Un ejemplo de producto que hace bueno aquel lema del te- beo infantil Pulgarcito , “increí- ble pero mentira”, es la sal del Himalaya, que, supuestamente, “contiene 84 ele- mentos esenciales para la sa- lud” y sirve igual para el reúma que para la piel. En realidad ni es del Himalaya ni contiene todos esos productos. Esta sal rosa viene de la segunda mina de sal más grande del mundo, la de Khewra, en las montañas de Pakistán, tan distante del Hi- malaya como Bilbao de Cádiz. Además, la Agencia de Protec- ción del Consumidor de Bavie- ra determinó en el año 2003 que esta sal tiene solo diez ele- mentos distintos, de los cuales el cloruro de sodio, la sal de toda vida, esa que es el origen etimológico de la palabra sala- rio, supone el 95%. Eso sí, es rosa y más cara. José Miguel Mulet, bioquímico de la Universidad Politécnica de Valencia, combativo contra las pseudociencias en general y contras los mitos alimenta- rios en particular, ha publica- do ¿Qué es comer sano? Las dudas, mitos y engaños más extendidos sobre la alimenta- ción . En este libro, que sigue la estela de su anterior, Comer sin miedo, responde a las 101 pre- guntas más habituales de su blog, uno de los más populares en cuestiones alimen- tarias. “En el mundo de la alimen- tación y la n u t r i c i ó n circulan mu- chos mitos e i n for mac i ones falsas, y es difícil orientarse en ese maremágnum in- formativo. Este li- bro es una guía de consulta rápi- “ E n el mundo de la alimentación y la nutrición circulan muchos mitos e informaciones falsas ”

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