Nuestra NEBRIJA 27 - Octubre 2018

31 N del entrenador, que me ayudó mucho a entender a Sonia, mi personaje en la película. ¿Cree que el mensaje social de la película será entendido por la Academia de Hollywood, tildada a menudo de ortodoxa? Campeones se estrenó en el Festival de Seattle y ganó el segundo premio del público – votaban 90.000 personas–. En breve estaremos calentando motores en el Festival de Mia- mi. El futuro no lo puedo saber, pero mi deseo es que así sea. No sólo por la película, sino por las puertas que podría seguir abriendo en lo referente a la discapacidad intelectual. ¿A quién le dedicaría el Óscar si lo ganara? Bueno, el Óscar lo ganaríamos muchas personas... Si así fue- ra, me gustaría dedicárselo a todas las madres de ‘campeo- nes’ que luchan día a día para que sus hijos salgan adelante. Todas las madres lo hacemos, pero lo de ellas es más difícil y tiene más mérito. ¿Le resulta complicado compaginar su carrera artística con la de docente en la Universidad Nebrija? No. Me encanta dar clase. Transmitir pasión e ilusión so- bre un escenario tiene mucho que ver con hacerlo en un aula. Me gusta hacer sentir y aprender y eso lo intento ha- cer igual actuando que dando clase. Ojalá la vida me permita poder seguir haciendo las dos cosas siempre. Como actriz y profesora, ¿cree que los mensajes sociales tienen más efectividad en el cine o en las aulas? Creo que todo debería estar conectado. El arte es un im- portante motor social y como tal tiene una responsabilidad. En el Grado en Artes Escéni- cas de la Nebrija se prepara a los futuros artistas para que sean conscientes de ese poder y de esa responsabilidad que tendrán. Y al mismo tiempo, se les forma para que adquieran las herramientas necesarias para poder entender y apreciar el arte con conciencia social que personas como Federico García Lorca, Joan Littlewood o Bertolt Brecht crearon antes que ellos. A la gente le gusta sentir cuando va al cine y esta película te hacer reír y también llorar