Nuestra NEBRIJA 28 - Enero 2019

42 Nebrija Investiga Alejandro Beltrán Ortega y Clara Martín Duque. Investigadores del Grupo Nebrija de Análisis Económico del Sistema Turístico Son muchos los artículos que se han escrito últimamente so- bre la turismofobia y las conse- cuencias negativas del turismo para los destinos turísticos. Sin embargo, no son tantas las so- luciones aportadas respecto a esta temática. Si se revisa la literatura especializada sobre los impactos turísticos, obser- vamos que la falta de civismo de los turistas se encuentra en- tre las causas más recurrentes a la hora de evaluar los impac- tos socioculturales negativos del turismo. Uno de los mayores perjudicados por esta cuestión es precisamente el patrimonio cultural, muy vulnerable a estos comportamientos y cuyas con- secuencias pueden resultar, en algunas ocasiones, irreversi- bles. La UNESCO definió en 1982 el patrimonio cultural de un pue- blo como el conjunto de las obras de sus artistas, arquitec- tos, músicos, escritores y sa- bios, así como las creaciones anónimas, surgidas del alma popular, y el conjunto de valo- res que dan sentido a la vida, es decir, las obras materiales y no materiales que expresan la creatividad de ese pueblo; la lengua, los ritos, las creencias, los lugares y monumentos his- tóricos, la literatura, las obras de arte y los archivos y biblio- tecas. Desde entonces son nu- merosos los lugares cuyo valor singular ha supuesto la decla- ración como patrimonio de la humanidad por parte de la agencia de la ONU, añadiendo además nuevas categorías dig- nas de protección, como el pa- trimonio natural o el inmaterial. España es uno de los países del mundo con mayor número de enclaves, tanto culturales como naturales, y de rasgos identi- tarios de carácter inmaterial reconocidos como patrimonio de la humanidad, tan solo por detrás de Italia y China. Esta diversidad se ha convertido en un indudable recurso de inte- rés turístico. A ello hemos de añadir todos los lugares que, aún sin tener esta declaración, están incluidos en algunas de las figuras de protección pre- vistas en la ley 16/1985, de 25 de junio, del patrimonio his- tórico español, como bien de interés cultural o simplemente inventariados en las cartas ar- queológicas. Sin embargo, este panorama se encuentra en riesgo evidente de conservación a causa, fun- damentalmente, de cierto tipo de turismo ausente de valores cívicos y de la falta de políticas activas que fomenten la investi- gación, valoración y difusión de este patrimonio, gran parte del cual permanece semiabando- nado e incluso totalmente ajeno a la acción de las instituciones La inversión en estrategias de interpretación patrimonial es el camino que hay que seguir para la protección y conservación integral del patrimonio cultural de España. La interpretación del patrimonio como herramienta para combatir la turismofobia