Nuestra NEBRIJA 35 - octubre 2020

La Universidad le atrapó desde el principio, pero a lo largo de su extensa carrera siempre ha colaborado con el mundo profe- sional, sobre todo en el campo de los Recursos Humanos. “Mi especialidad es la evaluación, y en concreto la construcción y el desarrollo de test y otros instru- mentos de medida”. Pero nunca se apartó de su primer impulso: el de ser universitario. “Siempre me han gustado los tres gran- des componentes de la univer- sidad: la docencia, la investiga- ción y la gestión”. ¿La formación psicológica ayuda a entender mejor al ser humano y por lo tanto a uno mismo? Por supuesto que te ayuda, pero no es una varita mágica. Enten- derse a uno mismo es un clási- co griego. En el frontispicio del templo de Apolo en Delfos había una inscripción: Nosce te ipsum . Conócete a ti mismo. Y hay que empezar por ahí, por tener una idea ajustada de uno mismo. Es uno de los componentes de la Inteligencia Emocional. Su carrera investigadora ha sido incesante y muy fecunda. De todo lo que ha aprendido, ¿qué le gustaría transmitir a los jóvenes investigadores? Investigar es una actividad muy gratificante. Te permite tener una experiencia muy singu- lar, ser testigo del nacimiento de algo que no se conocía. Es como asistir a un parto, inte- lectual, claro. Es una actividad que “engancha”. Mi consejo a los jóvenes universitarios es que no se pierdan esa experiencia, bien sea en ciencias básicas o aplicadas, culturales o tecno- lógicas: todos los campos son susceptibles de la actividad in- vestigadora. ¿Cuál es su consejo para los alumnos que desean tener éxito en los estudios y en su vida profesional? La fórmula magistral para tener éxito académico y profesional es muy sencilla: se trata de unir el esfuerzo a la capacidad. Hay que trabajar duro, esforzarse. A menudo los jóvenes no son educados en la cultura del esfuerzo que está usted preconizando. ¿Qué hacer? Hay que empezar predicando con el ejemplo, los padres y profesores tienen que enviar el mensaje de que para conseguir algo importante se requiere es- fuerzo y saber esperar. Antes de recoger los frutos hay que culti- varlos con mimo. Hay que saber esperar, retrasar las recompen- sas. El inmediatismo es un indi- cador de inmadurez. Ha citado el papel de los profesores, ¿cómo es el buen profesor? Los expertos han escrito ríos de tinta sobre ello. Pero, en síntesis, un buen profesor es el que, en primer lugar, conoce a fondo su materia, su campo de especia- lización. En segundo, es capaz de comunicarla de forma clara y estructurada. Y en tercero, mo- tiva y estimula a los estudiantes para que trabajen, progresen y 7 N Estudió Psicología en la Universidad Complutense y obtuvo su primera cátedra a los 34 años. Fue becario Fulbright en los Estados Unidos y vivió el Madrid de la Movida. Asturiano, investigador infatigable y experto en Psicometría, el nuevo rector de Nebrija afronta esta etapa ilusionado y apostando por la meritocracia, la excelencia y la transparencia. " H ay que empezar por tener una idea ajustada de uno mismo "

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