Nuestra NEBRIJA 40 - Enero 2022

La conducción autónoma, más cerca de ser asequible Precisamente en el precio que tendría este turis- mo sin conductor está una de sus claves. El proyec- to Neva busca abaratar los costes de la conducción autónoma. Badea pone como referencia los proyec- tos de coche autónomo actuales que, “solo en costes de hardware y sensórica pueden oscilar entre los 300.000 y los 500.000 euros”. Otro de los objetivos del tándem Universidad Nebrija-FEM Expert es que el vehículo alcance una autonomía de nivel 4. Estos niveles indican el gra- do de automatización del vehículo, que incluye por ejemplo los sistemas de ayuda al conductor (ADAS). Algunos, como el sistema de velocidad de crucero o la alerta de cambio involuntario ya son obligatorios desde este año en los nuevos vehículos y otorgan a un coche niveles 1 y 2. El nivel 4 de Neva “significa que el vehículo se puede conducir sin la necesidad de una persona detrás del volante, pero solo bajo unas condiciones específicas en las que no haya lluvia o se circule en ciudad, entre otros”, explica Badea. El desafío no es solo tecnológico No obstante, este proyecto transversal de inge- niería no solo se enfrenta al desafío tecnológico, sino que tiene otros muchos retos por delante. En- tre ellos destaca “el diseño de una normativa local, regional y estatal que limite lo que se puede hacer y lo que las empresas pueden llegar a desarrollar o no dentro de la misma”, declara José Luis Olazagoi- tia, profesor de la Escuela Politécnica Superior de la Universidad Nebrija e investigador principal del Grupo GREEN de Investigación en Ingeniería de Vehículos. Del mismo modo, Badea basa el éxito del turis- mo en tres premisas: conseguir que la tecnología sea 100% segura y utilizable; delimitar su aplicabilidad, es decir en dónde y para qué se va a utilizar el coche; y, finalmente, afrontar el reto más importante según el investigador, que es el de “su aceptación social, ya que sin el apoyo de la gente ninguna tecnología tiene futuro”. Los estudiantes de Nebrija también son parte de Neva A todos estos ingredientes hay que añadirle el componente de la transversalidad. En el proyecto han participado no solo investigadores, docentes, doctores o profesionales de la ingeniería, sino que también los estudiantes de la Universidad Nebrija han puesto su granito de arena. La experiencia es especialmente valiosa para los alumnos, ya que les da la oportunidad de acercarse Autonomous driving is closer to being affordable The price of this self-driving car is precisely one of its keys. The Neva project seeks to lower the costs of autonomous driving. Badea sets current autonomous car projects as a reference, which “just in hardware and sensors costs can range between 300,000 and 500,000 euros”. Another of the objectives of the Nebrija University-FEM Expert team is for the vehicle to reach level 4 autonomy. These levels indicate the vehicle’s degree of automation, which includes, for example, driver assistance systems (ADAS). Some, such as the cruising speed system or the lane departure warning system, have already been mandatory since this year in new vehicles and give cars levels 1 and 2 of autonomy. Neva’s level 4 “means that the vehicle can be driven without the need for a person to be behind the wheel, but only under specific conditions in which there is no rain or is driving in the city, among others”, explains Badea. The challenge is not only technological Nevertheless, this interdisciplinary engineering project not only faces a technological challenge, but also has many other challenges ahead. Among them stands out “the design of a local, regional and state regulation that limits what can be done and what companies may develop within it,” says José Luis Olazagoitia, professor at Nebrija University’s Higher Polytechnic School and principal investigator of the GREEN Research Group in Vehicle Engineering. Similarly, Badea bases the car’s success on three premises: making the technology 100% safe and usable; defining its applicability, that is, where and for what purpose will the car be used; and, finally, facing the most important challenge according to the researcher, which is that of “its social acceptance, since without the support of people, no technology has a future.” Nebrija students are also part of Neva We must also add the component of transversality to all these ingredients. In addition to the researchers, professors, doctors and engineering professionals that participated in the project, Nebrija University students also did their part. The experience is especially valuable for students, as it gives them the opportunity to get closer to a cutting-edge professional environment. “The students who participate come out very well 23 Nuestra Nebrija

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjY=