Nuestra NEBRIJA 42 - Julio 2022

“ Vais a ser imparables, llevad a Nebrija en vues- tro corazón y pensamiento. Hoy es el primer día del resto de vuestras vidas, todas las largas caminatas empiezan con un paso. Como decía Cha- vela Vargas, ¡que os vaya bonito!”. En este deseo, lanzado al aire por el rector José Muñiz, caben todas las esperanzas posibles ante la nueva etapa que los ya egresados emprenden. En las ceremonias de gra- duación, los exalumnos reconocen tanto en silencio como en los corrillos posteriores su capacidad para aprender en los momentos más duros de la pande- mia. Con la beca roja impuesta, no paran de volver- se hacia sus profesores y las filas de asientos de fa- miliares y amigos buscando complicidad y sonrisas. Alguna que otra lágrima recorre también sus caras. José Muñiz recuerda a los graduandos que la Universidad no solo les confirma el reconocimien- to académico, sino dos títulos más “de regalo”: el de embajadores de Nebrija, “para que representéis bien la excelencia, el cuidado de los detalles, las ga- nas por seguir aprendiendo, la humildad intelectual, la curiosidad y el no tener miedo”, y el de antiguos alumnos “para seguir manteniendo una relación es- trecha con todos vosotros”. Los discursos y los ritos forman parte ineludi- ble del programa, que incluye el solemne cortejo de profesores, los himnos Veni Creator y Gaudeamus igitur y este año también, por vez primera, la músi- ca de los gaiteros del Centro Asturiano de Madrid. El V Centenario de Antonio de Nebrija, que llega a 33 Nuestra Nebrija