Nuestra NEBRIJA 43 - Octubre 2022

E s licenciado en Bellas Artes, doctor en Cien- cias Sociales y director del Departamento de Artes de la Universidad Nebrija. Ahora amplía su ecosistema formativo artístico con una propues- ta pionera en España. “Se trata de complementar lo ofrecido por el Centro de Estudios Hispánicos, que ya realiza cursos culturales en inglés, pero con programas especializados en el arte”, avanza. Con el objetivo de enriquecer la vida de las personas a través de las artes y la creación artística, el Instituto Nebrija de las Artes ha llegado para quedarse. ¿Cómo se gestó la creación del Instituto Nebrija de las Artes? El instituto nace hace muchos años, en 2011. Trabajé junto a Pilar Alcover, directora del Centro de Estudios Hispánicos, y desarrollé un pequeño curso en inglés de gestión cultural en Madrid dirigi- do a alumnos norteamericanos, para que pudieran visitar la ciudad y la utilizaran como un sitio de ges- tión cultural. Ese fue el inicio de la idea. En 2013 lle- gó la crisis y tuve otros proyectos que atender, pero siempre trabajando con un pie en Estados Unidos y en el extranjero en general. Posteriormente, tras mi incorporación de nuevo a Nebrija en 2022, y moti- vado por Manuel Villa-Cellino, presidente del Con- sejo Rector de la Universidad, creé algo que tuviese proyección y que nos ayudara a crecer en el Depar- tamento de Artes. ¿Con qué misión nace? El Instituto Nebrija de las Artes tiene como mi- sión principal proyectar Madrid como destino artís- tico internacional para estudiantes de arte. Madrid es un polo muy atractivo para toda clase de carreras, sin embargo, no existen programas especializados en enseñanzas artísticas para alumnos extranjeros que estudian artes, digamos que hay un vacío. En el mundo anglosajón o el mundo asiático, muchos estudiantes viajan primero a Italia o Fran- cia por la proyección que tiene allí el Renacimien- to, por la historia, por la cultura, por cómo se han vendido al mundo. En este aspecto, España queda relegada a una especie de sitio exótico, interesan- te y muy atractivo, donde se mezcla un poco todo. Pero creo que nuestro país tiene recursos además para ser un lugar de formación artística que no solo mira al pasado, a la tradición grecolatina que puede estar presente en museos como el Prado, el Thyssen o el Reina Sofía. Madrid está unido a una vitalidad contemporánea muy marcada; es un recurso funda- mental y muy valioso como enseñanza que es muy significativa para mucha gente que no lo conoce. No solo hablamos de ir a dar una vuelta por los museos, 13 Nuestra Nebrija