Nuestra NEBRIJA 44 - Enero 2023

nes humanos. Después, desciframos el genoma de diversos organismos de enorme importancia evolu- tiva, incluyendo el chimpancé y otros primates. De ahí pasamos al estudio de los genomas de muchos centenares de pacientes con cáncer, en una aventu- ra intensísima y de enorme repercusión científica y personal. Finalmente, en estos últimos años hemos descubierto nuevos síndromes de envejecimiento acelerado; hemos hallado nuevos genes causantes de autismo, muerte súbita y melanoma hereditario; hemos definido las claves y meta-claves moleculares de la salud, del envejecimiento y del cáncer; hemos detectado bacterias pro-longevidad; hemos diseña- do estrategias de edición génica para el tratamiento de algunas enfermedades; hemos descifrado las cla- ves del rejuvenecimiento continuo de las medusas inmortales; y hemos identificado un gen humano esencial para la infección por el coronavirus SARS- CoV-2. En suma, un largo viaje de conocimiento que nunca termina y que otros continuarán. ¿Cómo valora el potencial humano español en su área de especialización? Siempre digo que el talento es el bien mejor repartido en nuestro planeta y España no es una excepción. A lo largo de mi carrera científica y aca- démica he tenido mentores extraordinarios, pero también estudiantes con un compromiso conmo- vedor con la búsqueda del conocimiento. De todos ellos he aprendido grandes lecciones. Ha presentado la curiosidad como un don, como un regalo con el que, probablemente, se nace. ¿Puede cultivarse, inocularse en las personas? Así es, la curiosidad y las emociones se pueden entrenar. En mis clases siempre he tratado de edu- car a los alumnos en el asombro, que no es otra cosa que instruirlos en la idea de tener los ojos muy abiertos al mundo y a la vida. Ha declarado: “No es mejor siempre vivir más, es preferible ser mejores”. ¿Cómo ser mejores? Cultivando la empatía y el altruismo. Siempre he pensado que cada adversidad ajena es una lección de humanidad y que la solidaridad frente a ellas re- presenta una de las cumbres de la felicidad. Además, practicar estas actitudes puede ayudar a mejorar la salud. Varios estudios científicos han demostrado que el altruismo favorece la inducción de respuestas biológicas positivas para nuestro organismo inclu- yendo la estimulación del sistema inmune, la reduc- ción de inflamaciones crónicas o inapropiadas, o la disminución de los niveles de cortisol. El talento es el bien mejor repartido en nuestro planeta y España no es una excepción” Mis sueños (…) se centran en desear que el conocimiento supere a la ignorancia, que el silencio se imponga al ruido, o que la cohesión social supere a la falta de equidad” 17 Nuestra Nebrija

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