Nuestra NEBRIJA 47- Diciembre 2023
I nvestigadora principal del grupo ARIES (Investigación Aplicada en Ingeniería y Ciencias de la Computación), Nieves Cubo abrió el curso con un mensaje que suponía toda una declaración de intenciones: que “todos, incluso aquellos que no se consideren curiosos, despierten la curiosidad de los demás, invitándolos a re- flexionar y planteándoles desafíos”. Tuvo peticiones específicas para los docentes: “Debemos dar cabida a la curiosidad, a la imagi- nación y a otras posibilidades no contempladas. Fomentemos la lectura especializada como herra- mienta para desarrollar un pensamiento crítico sólido”. Y hubo otras para la Comunidad Univer- sitaria en su conjunto: “Evitemos caer en la pasi- vidad mental. Debemos cuestionar lo que vemos en las noticias y contrastar la información. Reser- vemos algo de tiempo diario lejos de las pantallas y pensemos en algo que nos gustaría conocer más a fondo”. Con el título Atrévete a saber. De la curiosidad al conocimiento, a través de la investigación , el discurso retrató la curiosidad -“ese dragón dormi- do que en mi caso cultivaron mis padres”- como una compañera de vida “que debe ser alimentada o se marchitará y dejará de dar frutos”. La necesidad de dar respuesta a todas las incógnitas, el impulso de explorar el mundo para intentar comprenderlo y el “de- seo natural” de aprender cosas nuevas, entender su origen y saber cómo funcio- nan, según Nieves Cubo, aderezan “un comportamiento que se puede encontrar en nuestra naturaleza curiosa y en nuestra propia emoción humana”. El “innato” proceso para intentar responder a todas las preguntas tiene que ver con la observación y la recopilación de datos para “rellenar los huecos que faltan”. La profesora de la Universidad Nebrija explicó que ahí entra en escena la investigación, que “ayuda a desarrollar nuestras habilidades cognitivas, como el pensamiento crítico, la resolución de problemas y la creatividad”. La liberación de dopamina Desde un punto de vista biológico, Nieves Cubo explicó que cuando sentimos curiosidad por algo, nuestro cerebro libera do- pamina, una hormona que está relacionada con el placer y la mo- tivación. La dopamina “nos ayuda a centrar nuestra atención en el objeto de nuestra curiosidad y a procesar la información de ma- nera más eficiente”. Además, la curiosidad activa las regiones del cerebro que están involucradas en el aprendizaje y la memoria, entre las que se encuentran el hipocampo, la amígdala y la corteza prefrontal. “Cuando estamos curiosos , nuestro cerebro está más abierto a nuevas ideas y perspectivas. Esto nos permite aprender y retener información de una manera más profunda y significati- va”, concretó. La curiosidad, paradójicamente, puede ir apagándose mien- tras crecemos y nos formamos. El peligro se viste de vida adul- ta, cuya rutina y responsabilidades “dejan menos momentos de “Cuando estamos curiosos , nuestro cerebro está más abierto a nuevas ideas y perspectivas” “Cuando sentimos curiosidad por algo, nuestro cerebro libera dopamina, una hormona que está relacionada con el placer y la motivación” 43 Nuestra Nebrija
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