Nuestra NEBRIJA 47- Diciembre 2023

P or diferentes motivos (sanitarios, comerciales, tecnológicos, geopolíticos, medioambientales, etc.), desde inicios de siglo estamos asistiendo a escala global a un aumento generalizado de medidas de corte proteccionista y a la implantación de políti- cas nacionales de apoyo directo a determinados sec- tores y empresas. Estas acciones están dificultando el desarrollo del comercio mundial y de las inversiones directas en el exterior, afectando negativamente al crecimiento del PIB mundial, exacerbando las tensio- nes inflacionistas existentes y deteriorando las condi- ciones de competencia efectiva en muchos mercados. Incluso empiezan a dejar sentir sus nocivas conse- cuencias en la lucha contra la pobreza y en la mejora de las condiciones de vida para muchas personas, es- pecialmente en los países en vías de desarrollo También están forzando a las empresas a revisar sus políticas de fragmentación de la producción y aprovisionamiento en distintos lugares del mundo, que habían acometido para mejorar su competitivi- dad, y que están enfocando hacia mercados más cer- canos y “amigables”. Al mismo tiempo, el papel de las instituciones in- ternacionales creadas en el pasado siglo para facili- tar la libre circulación de los factores de producción es cada vez menos trascendente por falta de apoyo político. Estamos, pues, ante una modificación sus- tancial del orden económico internacional, con más intervención pública a escala nacional, más incerti- dumbre y una tendencia a la concentración regional de la globalización que está alterando sustancialmen- te las condiciones para la internacionalización de las empresas y el desarrollo económico global. F or various reasons (health, commercial, technological, geopolitical, environmental, etc.), global trends since the turn of the century have seen a marked increase in protectionist measures and the adoption of national policies offering direct support to specific sectors and companies. These actions are hindering the development of global trade and direct investments abroad, negatively affecting global GDP growth, exacerbating existing inflationary tensions and deteriorating the conditions of effective competition in many markets. They are even beginning to make their harmful consequences felt in the fight against poverty and in improving living conditions for many people, especially in developing countries. They are also forcing companies to review their production and supply fragmentation policies in different parts of the world, which they had undertaken to improve their competitiveness, and which are focusing on closer and “friendly” markets. At the same time, the role of international institutions created in the last century to facilitate the free circulation of factors of production is increasingly less important due to lack of political support. We are, therefore, facing a substantial modification of the international economic order, with more public intervention at a national level, more uncertainty and a tendency towards regional concentration of globalization that is substantially altering the conditions for the internationalization of companies and global economic development. 55 Nuestra Nebrija