La relevancia del enfoque intercultural en el aula de lengua extranjera
RESUMEN
Hoy en día se refleja la convivencia de varias culturas en un mismo ámbito ya sea físico, político o social. Vivimos en la era de la globalización. Las fronteras se desdibujan. Lo lejano se vuelve cercano. Descubrimos que las necesidades de los demás no difieren en mucho de las nuestras, y que los obstáculos o barreras culturales son más fáciles de levantar de lo que pensamos.
Llevando esta reflexión al campo de la enseñanza de una L2, los elementos que conforman y dan significado a un nueva metodología de enseñanza-aprendizaje tratan de ser una ventana abierta hacia la cultura del Otro y, para alcanzar dicho objetivo se incorpora en el proceso de enseñanza – aprendizaje las nuevas tecnologías; éstas son un poderoso aliado para potenciar y conseguir los efectos que persigue, es decir, preparar ciudadanos cada vez más libres, solidarios y responsables. Asimismo, las nuevas tecnologías facilitan extraordinariamente la interculturalidad: la comunicación entre las personas, de culturas idénticas o diferentes, del mismo país o de tierras lejanas; las distancias se acortan, y las dificultades para llegar a los demás también.
En este artículo, nos proponemos, en un primer momento, exponer la importancia de un aprendizaje desde una perspectiva intercultural, a continuación, analizar los parámetros que definen una metodología intercultural y, finalmente aportar un ejemplo de enseñanza-aprendizaje de una L2 intercultural.
Palabras clave: Interculturalidad, lengua extranjera, estudiante
ABSTRACT
Today is reflected the coexistence of various cultures in the same area either physical, political or social. We live in the era of globalization. The borders are blurred. So far it becomes nearby. We discovered that the needs of others do not differ in much of ours, and that the obstacles or cultural barriers are easier to lift of what we think. Bringing this reflection to the course of the teaching of a foreign language, the elements that make up and give meaning to a new methodology for teaching-learning try to be an open window toward the culture of another and, to achieve that goal is incorporated in the process of teaching, learning new technologies; they are a powerful ally to enhance and get the effects that pursues, i.e. preparing citizens increasingly free, caring and responsible. Also, the new technologies facilitate extraordinarily an intercultural approach: the communication between people, of cultures identical or different, the same country or in distant lands; the distances are shorter, and the difficulties in reaching out to others, too.
In this article, we intend, at first, exposing the importance of an intercultural approach to second language education, then analyze the parameters that define a methodology intercultural and, finally provide an example of teaching-learning a foreign language
Keywords: Intercultural, foreign language, student
1. Introducción
En la actualidad, la enseñanza - aprendizaje de una L2 no se puede concebir sin tener muy en cuenta el contexto en el que se habla. Esto, que nos parece tan evidente, no era tan obvio en las primeras concepciones de la enseñanza de lenguas extranjeras pues si nos remontamos a los métodos anteriores (tradicionales y estructuralistas) la cultura, en esos métodos, era contemplada como algo secundario al proceso de aprendizaje de una lengua. Las actividades que proponían mostraban actos de habla descontextualizados que obstaculizaban, en gran medida, el acercamiento de la realidad de esa cultura al estudiante. Esta realidad representada estaba formada, en muchas ocasiones, por estereotipos debido a la aplicación de la cultura con minúscula que más que conectar los conceptos de lengua y cultura, que sería lo deseable, proporcionaba al estudiante datos aislados acerca de la cultura nueva.
El panorama actual de la enseñanza-aprendizaje de las lenguas trae una auténtica revolución a la didáctica de las lenguas. Las nuevas orientaciones propuestas por el enfoque nocio-funcional priman la consideración del lenguaje como instrumento de comunicación, con lo que el papel del componente cultural se ve reforzado. Estos nuevos planteamientos suponen que para conseguir una auténtica competencia comunicativa, los estudiantes tienen que aprender a reconocer la realidad sociocultural que subyace a todo acto de habla, por lo que los intercambios lingüísticos deben estar insertos en un contexto que permita identificar todos los componentes de una situación de comunicación como son: la relación social y afectiva entre los interlocutores, los fines de la comunicación, la formalidad o informalidad en el tratamiento de los temas, la adecuación del registro empleado, etc.
Algunos autores como Crawford-Lange & Lange (1984) y Kramsch (1993), defienden un tratamiento de la cultura integrado con la lengua, pero considerando la cultura como un proceso, es decir, como un conjunto de fenómenos en continuo cambio a lo largo del tiempo, en función de los individuos y de los lugares en los que esa cultura se desarrolla.
Por lo tanto, hoy no se concibe, de ningún modo, poner una línea divisoria entre la lengua y la cultura puesto que la lengua expresa cultura y por medio de ella adquirimos la cultura. Carmen Guillén (2004) expresa claramente esta idea cuando dice que:
2. ¿Qué entendemos por interculturalidad?
La interculturalidad se manifiesta como un eje transversal que traspasa fronteras; un encuentro intercultural implica no solamente la convivencia de culturas diferentes, la interacción, sino también el reconocimiento y el respeto de la diversidad del “otro” y la profundización de su “yo”, es decir, “yo” con y desde el otro.
Si bien es cierto que no encontramos este término definido en el diccionario de la Real Academia, son muchos los autores que han querido delimitar este concepto aportando definiciones. Así, por ejemplo, José Luis Atienza (1997) se inclina por una definición de carácter etnográfico al hablar de “conciencia” tal y como se desprende de estas líneas:
Para la profesora Isabel Iglesias (2003), la interculturalidad la define en estos términos:
“Debe consistir en ir más allá de la comprensión periférica y superficial. Por eso favorecer el conocimiento y el reconocimiento de lo que es distinto... ha de ser una práctica habitual en el aula de lenguas extranjeras”. (Iglesias, 2003, p. 24).
La interculturalidad, en definitiva, describe una relación entre culturas, es una actitud ante la vida, es un posicionamiento que intenta alejarse de los centrismos y dirigir sus “tentáculos” hacia fuera, es apertura, es diálogo y, también es creatividad. John Corbett (2003) ahonda en esta misma idea al indicar que:
Para este mismo autor, el enfoque intercultural prioriza la reflexión comparativa sobre el uso de los códigos verbales y no verbales entre la cultura del aprendiz y la de la comunidad lingüística a la que pertenece la lengua extranjera.
La interculturalidad apuesta, por un lado, por el diálogo ya que considera a éste como un elemento intrínseco al ser humano (sentimos, percibimos siempre con respecto a algo o a alguien) y, por otro lado, por la pluralidad cultural, esto es, aceptar y comprender el modo de ser y de pensar de la otra cultura sin imponer ni dominar en ningunas circunstancias.
Autores como Samovar y Porter (1994), Byram (1997), Byram, Gribkova, Starkey (2002) y Corbett (2003) entre otros, abordan el concepto de competencia intercultural y lo definen como la capacidad para comunicarse eficazmente en situaciones interculturales y para establecer relaciones apropiadas dentro de contextos culturales diversos. Guilherme (2000), por su parte, presenta dicha competencia de la siguiente manera:
3. La Red: un medio que estimula la interculturalidad
En la actualidad, somos muchos los docentes que estamos convencidos de que la enseñanza - aprendizaje de una L2 se encuentra en una fase de cambios significativos provocados por la aparición del uso de Internet. La Red ejerce un papel relevante en la medida en que, con su ayuda, se nos permite traspasar los límites del aula, del manual, alejándonos, de este modo, de una enseñanza presencial unidireccional para desembocar en un horizonte abierto, sin fronteras y cercano favoreciendo planteamientos más creativos que potencien actividades multidireccionales.
Las TICs en el aula de lengua extranjera permiten usar la lengua meta en contextos auténticos pues Internet suministra un acceso fácil y rápido para el uso de materiales reales y actuales en la lengua estudiada, lo que siempre resulta motivador para el estudiante. Otro beneficio importante derivado del uso de las nuevas tecnologías está basado en las oportunidades que propicia para la cooperación y la colaboración entre pares pues, las Red proporciona un espacio que permite de una manera fácil y asequible poner en contacto a profesores de diferentes emplazamientos para trabajar con estudiantes de diferentes países y culturas en proyectos comunes mediante la comunicación en línea. Por su parte, Katerine Zourou (2007) va un poco más allá apuntando que:
Por lo tanto, los nuevos soportes tecnológicos (la Red y los ordenadores) se ponen al servicio de la enseñanza y aprendizaje de una L2 y refuerzan y preservan los elementos culturales de una sociedad. Jacques Delors (1996), presidente de la Comisión europea entre los años 1985-1995, ya reforzaba esta idea al indicar que:
“Las posibilidades que aportan y las ventajas que ofrecen las nuevas tecnologías en el plano pedagógico son considerables […]. No se trata sin embargo de creer ingenuamente que ahora los alumnos aprenden más y mejor, solos y sin esfuerzo […]. El desarrollo de acciones y actividades utilizando los recursos telemáticos pueden ayudar a la interculturalidad si se dan las condiciones necesarias”. (Delors, 1996, p. 38).
Este nuevo entorno virtual, esta ventana abierta al mundo, nos propone nuevas metodologías, nuevos retos en nuestra aula de idiomas. La fusión de las nuevas tecnologías con la competencia intercultural sitúa la enseñanza-aprendizaje de la lengua meta dentro de un contexto social y cultural. Dentro de estas nuevas metodologías se encuentran, entre otros, los proyectos lingüísticos en línea que presentaremos más adelante como ejemplo de dispositivo intercultural. Según autores como Lamy y Hampel (2007) los proyectos lingüísticos practican la interculturalidad en la medida en que tienen en cuenta la contextualización y sitúan la lengua dentro de un contexto social y cultural:
3.1. Dispositivos interculturales: los proyectos lingüísticos en línea
Los proyectos lingüísticos tienen por objeto aumentar la motivación, la capacidad y la confianza de los jóvenes para comunicar en otras lenguas y potenciar la dimensión de ambas realidades sociales y culturales; estos proyectos promueven igualmente la cooperación transnacional entre centros educativos diferentes. Esta interrelación permite a los participantes intercambiar experiencias, explorar diferentes aspectos de la diversidad cultural, social y económica de aquellos países elegidos, ampliar sus conocimientos generales y comprender y apreciar mejor sus opiniones respectivas.
Asimismo, habría que resaltar que los proyectos lingüísticos proporcionan un contexto de aprendizaje que promueven y estimulan la enseñanza - aprendizaje de una L2 impulsando principalmente los siguientes elementos:
- El trabajo en equipo.
- Las relaciones sociales (alumno-alumno, alumno-profesor).
- La planificación.
- La realización de actividades en cooperación.
Del mismo modo, estos proyectos lingüísticos aplicados a la adquisición de una L2 pueden convertirse en una herramienta complementaria muy valiosa tanto para el alumno como para el profesor en la medida en que permiten:
- Conectarse en cualquier momento y en cualquier lugar: los límites físicos y cronológicos se desvanecen.
- Visualizar y acercar la cultura del otro
- Aprender, comprender y expresarse en la nueva lengua sincrónicamente
- Compartir experiencias
- Interrelacionarnos
Todos estos aspectos mencionados estimulan, a nuestro entender, la motivación y la capacidad de los alumnos para comunicarse en otras lenguas y, por consiguiente, aprenderlas.
Por último, estos proyectos se definen como interculturales[1] puesto que tienen en cuenta la contextualización al situar la lengua meta dentro de un contexto social y cultural (Lamy y Hampel 2007):
4. ¿Qué factores pueden medir la interculturalidad?
La interculturalidad, como ya hemos señalado en el apartado (2), es un proceso de interacción social que impulsa procesos de intercambios y, además, propone una comunicación horizontal, donde ninguno de los interlocutores se siente superior al otro.
Partiendo, pues, del principio de que aprender una nueva lengua significa entrar en contacto con una nueva lengua-cultura, esto nos hace plantearnos los siguientes interrogantes señalados por la profesora María Silvina Paricio Tato (2005) cuando hace referencia a la dimensión cultural de los manuales y que podríamos hacer extensivo a nuestro análisis:
- ¿Constituye la cultura un simple escenario que sirve de telón de fondo a los aprendizajes lingüísticos, o bien se integran como parte significativa de éstos?
- ¿Obedece la presentación de la cultura extranjera a una intencionalidad formativa?
- ¿Se incluyen referencias a la cultura de origen del alumno para contrastarla con la cultura meta?
- ¿Se ofrece una presentación de la cultura centrado en un único país, el más representativo de la lengua meta, o hay referencia a la pluralidad de países en los que se habla esa lengua extranjera?
- ¿Se presentan situaciones y se abordan temáticas relacionadas con los intereses y aficiones de los jóvenes?
- ¿Se invita al estudiante a profundizar en la cultura del país proponiéndole documentación complementaria (prensa, revistas, películas, ...)
- ¿Se incluyen documentos auténticos?
- ¿El contenido de las actividades hace referencia a aspectos socio-culturales tales como: los hábitos de la vida cotidiana, la vida política, la religión, la cortesía, la familia, la escuela, los valores,...?
- ¿Las actividades atienden a factores afectivos, cognitivos, situacionales?
- ¿Las actividades requieren la opinión del estudiante?
Todos estos interrogantes nos han llevado a confeccionar 13 parámetros que definen, a nuestro juicio, un enfoque intercultural y que presentamos a continuación:
- Promover actitudes, conductas y cambios sociales positivos mediante la enseñanza-aprendizaje de valores, habilidades, actitudes, conocimientos...de la nueva lengua-cultura.
- Facilitar el mantenimiento de la identidad y las características culturales
- Trabajar en un contexto no excluyente. Eliminar la jerarquización: las dos culturas en un mismo plano
- Descubrir que un conocimiento tiene el mismo valor que el otro
- Adquirir un punto de vista propio
- Favorecer el conocimiento del otro y modificar los prejuicios sobre los distintos grupos culturales
- Conocer mejor su propia cultura
- Promover el enfoque holístico e inclusivo
- Crear un espacio común de convivencia
- Eliminar el etnocentrismo: favorecer la comprensión
- Modificar estereotipos
- Crear una relación de empatía: ser capaz de compartir emociones
- Propiciar una toma de conciencia sobre la necesidad de un mundo más justo
La suma de todos y cada uno de estos elementos nos ha llevado a confeccionar una parrilla de análisis que recoge, en nuestra opinión, la esencia de una enseñanza - aprendizaje de una lengua extranjera encauzada desde la interculturalidad en la medida en que toman una especial relevancia los siguientes elementos:
- La motivación individual, el trabajo cooperativo, el conocimiento del mundo, de las vivencias y, también el reconocimiento social de la lengua extranjera. Un escenario abierto donde fluyen las reflexiones, las opiniones, las culturas
- La eliminación, en la medida de lo posible, de elementos tales como: la dominación cultural, los estereotipos. Un escenario cerrado que obstaculiza o limita el proceso de enseñanza y aprendizaje
Finalmente, un enfoque intercultural necesita de la aplicación de una metodología comparativa en la medida en que ésta permite encauzar la enseñanza-aprendizaje de una L2 dentro de un contexto que favorece el análisis de las similitudes y de las diferencias existentes en ambas lenguas-culturas de estudio.
4.1. Parrilla de análisis intercultural
Nuestra parrilla de análisis intercultural se articula de la siguiente manera:
4.2. Modalidad de evaluación de la parrilla de análisis intercultural
Una vez seleccionados los 13 items que han de formar parte de nuestra parrilla de análisis, hemos reflexionado acerca de cómo evaluar el grado de interculturalidad de cualquier método utilizado en la enseñanza-aprendizaje de una lengua extranjera.Para alcanzar dicho propósito hemos utilizado los siguientes criterios:
- Criterios de catalogación: los hemos aplicado para elaborar listas respecto a los tipos de actividades, los tipos de temas tratados,…y poder así tener una información precisa y detallada del contenido de las tareas.
- Criterios de cuantificación: nos han servido para contabilizar temas, actividades, e indicarnos, de este modo, la variedad de las tareas y la extensión de las mismas.
- Criterios de valoración de tipo: Nulo / Bueno / Excelente que nos han indicado el grado de satisfacción del elemento analizado. Hemos calificado con “Nulo” cuando, al plantear las afirmaciones, éstas no han generado ninguna respuesta y no se ha llegado al mínimo exigido. Hemos calificado con “Bueno” al obtener una respuesta positiva; “Bueno” representa el cumplimiento correcto de los objetivos. Finalmente, con “Excelente” hemos querido reflejar el cumplimiento más allá de lo que se esperaba.
- Criterios de tipo: Sí o Siempre/ A veces / No o Nunca que nos han señalado la presencia, ausencia o frecuencia de algunos componentes. Hemos valorado con el criterio “sí o siempre” cuando el ítem planteado se ha cumplido en todas las circunstancias; con el criterio “a veces” al cumplirse en una o en dos ocasiones; con el criterio “no o nunca” al no cumplirse en ninguna circunstancia
- Criterios de discriminación (inclusión o exclusión de elementos) que hemos realizado con la ayuda de la señal “X”
Esta parrilla de análisis la hemos aplicado para verificar la incidencia intercultural en un proyecto lingüístico en línea de referencia como es el proyecto lingüístico “Cultura”. La resolución de las distintas actividades por parte de los estudiantes nos ha permitido, en muchos casos, verificar la interculturalidad de este proyecto lingüístico en línea.
5. “Cultura”: un ejemplo de proyecto lingüístico en línea que fomenta la interculturalidad
El proyecto lingüístico cuya dirección electrónica es http://web.mit.edu/french/culturaNEH[2] fue creado por un grupo de profesores de francés de tres universidades de los Estados Unidos en 1997. El equipo está formado por Gilberte Furstenberg de la universidad de MIT (Massachusetts Institute of Technology), Shoggy Thierry Waryn, profesor de francés en la universidad de Brown y Sabine Levet de la universidad Brandeis University. Los autores de este proyecto lo definen en estos términos:
Tal y como se desprende de esta cita, el proyecto “Cultura” trata de poner en contacto, a través de la herramienta de Internet, dos elementos: por un lado a estudiantes franceses, en este caso de la universidad de Brest y cuya lengua de aprendizaje es el inglés y, por otro lado, a estudiantes estadounidenses de la universidad de Massachusetts cuya lengua de aprendizaje es el francés. Durante un semestre estos estudiantes (franceses y estadounidenses) trabajarán conjuntamente.
Según estos mismos autores, si la meta es aprender una L2 sacando a la luz y acercando la cultura del otro, resulta imprescindible establecer una metodología y una herramienta que permita este proceso. ¿De qué manera el alumno se distancia menos de la lengua/cultura meta? Aplicando una metodología comparativa: utilizando la comparación de una lengua con la otra puede conllevar el florecimiento de sus características y, por consiguiente, tienen muchas más posibilidades de lograr sus objetivos tal y como nos señalan Bauer, Debenedette, Furstenberg, Levet y Waryn (2006) en estas líneas:
El proyecto “Cultura” pretende hacer visible y concreto la dimensión invisible y abstracta de la cultura. La distancia que existe entre los estudiantes franceses y estadounidenses (geográficamente y culturalmente) está utilizada para establecer una distancia entre sus percepciones y sus reflexiones. (Pothier, 2003:29). “Cultura” utiliza dicho distanciamiento como un elemento atractivo y no como un obstáculo. (Bernard, 1999).
Los autores de este proyecto son de la opinión de que ciertos comportamientos tienen su raíz en la cultura y esto es lo que explica las distintas maneras de interrelacionarse y de percibir el mundo del “Otro”.
5.1. “Cultura”: presentación del corpus de actividades
La presentación de las actividades del proyecto “Cultura” se visualizan en la Red de la siguiente manera:
Como se puede ver, el estudiante se encuentra ante tres bloques de actividades de dificultad ascendente; el estudiante realizará todas estas actividades en su lengua materna lo que implica una tarea aparentemente sin obstáculos lingüísticos dónde el trabajo del aprendiz consiste en reflexionar sobre sí mismo a partir de unos ítems determinados. Cuanto más aporte o más conozca su propia cultura mejor disposición adquirirá para adentrarse en la L2. Los temas abordados en estos tres bloques de actividades, presentados a continuación, hacen referencia a aspectos socio-culturales como por ejemplo: la familia, el gobierno, la escuela, el trabajo, la libertad, la religión,…) y el estudiante habrá de reflexionar sobre cada uno de estos conceptos.
1. Word Associations
2. Sentence Completions
3. Reactions to Situations
5.2. Aplicación de la parrilla intercultural al proyecto “Cultura”
Para verificar la interculturalidad de dicho proyecto hemos aplicado nuestra parrilla de análisis para comprobar, de este modo, si “Cultura” responde a los parámetros interculturales. Asimismo, queremos puntualizar que los datos obtenidos son fruto de la fusión de cuatro elementos relevantes como son:
- Proyecto lingüístico en línea
- Metodología comparativa
- Temas abordados en los tres bloques de actividades
- Respuestas aportadas por los dos grupos de estudiantes (franceses y estadounidenses)
5.2.1. “Cultura”: resultados de la parrilla de análisis
A partir de esta parrilla de análisis se extraen las siguientes observaciones que presentamos a continuación:
- Parámetro 1: Promover actitudes, conductas y cambios sociales positivos. Hemos señalado como indicador de frecuencia “a veces” debido a que el aprendizaje comparativo a partir de temas socio-políticos y culturales puede, en numerosas ocasiones, aclarar actitudes y conductas tal y como se refleja en las respuestas aportadas por ambos protagonistas del proyecto con respecto a la “vecindad” y el “dinero” respectivamente:
- Parámetro 2: Facilitar el mantenimiento de la identidad y las características culturales. Hemos señalado como indicador de frecuencia “siempre” debido a que tanto el método como los temas nos permiten conocer mejor nuestra propia cultura y reforzar así nuestra identidad. A modo de ejemplo, presentamos estos dos testimonios referidos al concepto de “cultura”:
- Parámetro 3: Trabajar en un contexto no excluyente. Eliminar la jerarquización: las dos culturas en un mismo plano. Hemos señalado como indicador de frecuencia “siempre” debido a que ambos elementos (metodología aplicada y temas abordados) se enmarcan dentro de un mismo escenario donde ambas lenguas-culturas se sitúan en un plano igualitario. Las dos culturas se encuentran en igualdad de condiciones: los participantes de este proyecto son estudiantes de la misma edad, son universitarios y su entorno social y aficiones son similares. Asimismo, sus opiniones se sitúan en un plano muy convergente. El método comparativo como los temas abordados nos ayudan a excluir la idea de jerarquización, de superioridad de una cultura sobre la otra. En el ejemplo que aportamos, los estudiantes expresan su punto de vista acerca de lo que consideran de lo que debe ser “unos buenos padres”:
I think French parents must feel the same way (Sasha S, USA).
- Parámetro 4: Descubrir que un conocimiento tiene el mismo valor que el otro. Hemos señalado como indicador de frecuencia “siempre” debido a que este sistema de trabajo permite al estudiante descubrir que el conocimiento puede ser computable en cantidad pero no en cualidad. El concepto de “amistad”, como se puede ver en el ejemplo que aportamos, viene a representar lo mismo en una u otra cultura:
- Parámetro 5: Adquirir un punto de vista propio. Hemos señalado como indicador de frecuencia “a veces” debido a que el proyecto así configurado posibilita que el estudiante con la ayuda de los conocimientos recibidos y aportados configure un punto de vista propio tal y como se refleja en este testimonio que habla de la imagen que el estudiante tiene de los Estados Unidos:
- Parámetro 6: Favorecer el conocimiento del otro y modificar los prejuicios sobre los distintos grupos culturales. Hemos señalado como indicador de frecuencia “a veces” debido a que el descubrimiento de la nueva cultura a través de las opiniones que uno tiene de la suya puede ayudar a estimular el conocimiento a la par que modificar prejuicios tal y como se refleja en estos ejemplos: los estudiantes opinan sobre el concepto de “Francia”:
- Parámetro 7: Conocer mejor su propia cultura. Hemos señalado como indicador de frecuencia “siempre”: el descubrimiento de nuestra propia cultura a través del otro. En este testimonio, un estudiante estadounidense se replantea el concepto de “Estados –Unidos”:
- Parámetro 8: Promover el enfoque holístico e inclusivo. Hemos señalado como indicador de frecuencia “siempre”: el enfoque educativo holístico e inclusivo parte del respeto y la valoración de la diversidad cultural, y busca la manera de incrementar la equidad educativa, superar el racismo/discriminación/exclusión, favorecer la comunicación y competencia interculturales, y apoyar el cambio social según principios de justicia social. Asimismo, toma en cuenta el contexto y la cultura del lugar, permitiendo incorporar la ética y los valores como elementos del desempeño competente. El método aplicado en este proyecto nos permite observar y evaluar desde diversos parámetros una misma realidad social como se desprende de los testimonios aportados anteriormente.
- Parámetro 9: Crear un espacio común de convivencia. Hemos señalado como indicador de frecuencia “siempre”: trabajar conjuntamente, en igualdad de condiciones, sin jerarquización y con temas afines a nuestra vida favorece siempre un espacio común de convivencia.
- Parámetro 10: Eliminar el etnocentrismo: favorecer la comprensión. Hemos señalado como indicador de frecuencia “siempre”. Aprendiendo comparando una cultura con la otra nos aleja del etnocentrismo formando personas abiertas y críticas.
- Parámetro 11: Modificar estereotipos. Hemos señalado como indicador de frecuencia “a veces”. Este sistema de aprendizaje a través de la comparación nos ofrece la posibilidad de reafirmar o modificar la visión positiva o negativa que tenemos de la otra cultura. Un estereotipo es una representación repetida frecuentemente que convierte algo complejo en algo simple. Es un proceso reduccionista que suele causar, a menudo, distorsión porque depende de su selección, categorización y generalización, haciendo énfasis en algunos atributos en detrimentos de otros. En esta intervención, los estudiantes reflexionan acerca de los estereotipos franceses:
- Parámetro 12: Crear una relación de empatía: ser capaz de compartir emociones. Hemos señalado como indicador de frecuencia “a veces”. Este sistema de trabajo puede permitir al estudiante interactuar con los demás, trabajar en equipo, fortalecer vínculos afectivos y establecer empatía social. Creemos que el proyecto “Cultura” aviva la motivación en el aprendizaje en la medida en que fomenta el trabajo en grupo lo cual da un sentido de pertenencia, promueve la autonomía y da una percepción práctica a lo aprendido.
- Parámetro 13: Propiciar una toma de conciencia sobre la necesidad de un mundo más justo. Hemos señalado como indicador de frecuencia “a veces”. Los temas de trabajo elegidos en este proyecto no dejan lugar a duda que pueden “propiciar una toma de conciencia sobre la necesidad de un mundo más justo”. Los estudiantes al comparar, reflexionar y verificar toman conciencia del mundo en el que viven descubriendo sus bondades pero también sus deficiencias y necesidades. En este ejemplo que aportamos a continuación, el estudiante expresa su opinión acerca de su posicionamiento con respecto el medio ambiente y los productos que lo deterioran:
A partir de esta parrilla de análisis que acabamos de presentar se desprende que la interculturalidad es el eje en torno al cual giran los tres bloques de actividades pues, desde su presentación, pasando por su metodología y finalizando con los temas propuestos están en función de la interculturalidad. Por lo tanto, con la parrilla de análisis intercultural queremos evidenciar que en el proyecto “Cultura” la elección del método aplicado - la comparación – junto con los temas elegidos favorecen la interculturalidad y por extensión podemos demostrar que este proyecto lingüístico está creado desde, por y para la interculturalidad. Este proyecto canaliza todos sus esfuerzos en lograr un aprendizaje intercultural por parte de los estudiantes. Para sus creadores, lo más importante es que los estudiantes sepan cómo viven, cómo piensan, cómo reaccionan y, en definitiva, cómo son los de la lengua meta. En otras palabras: la persona entera y su contexto.
6. Conclusiones
A modo de conclusión nos gustaría resaltar que el enfoque intercultural ha de formar parte esencial en el aula de lengua extranjera (lugar de diálogo y encuentro entre culturas) puesto que asume la misión de ir más allá del objeto lengua/cultura en la medida en que pone en relación contenidos culturales, valores, creencias, creando factores afectivos, cognitivos y situacionales. Es un enfoque abierto, flexible, enraizado en y a partir de la propia cultura.
Asimismo, la puesta en práctica de dicho enfoque invita al estudiante a reflexionar, a concienciarse de su entorno, a comparar, a contrastar, a relativizar, a ser crítico, a ser un etnógrafo que busca, recopila y compara con el fin de compartir, entender y asimilar la nueva cultura. En esta misma línea, Byram, Nichols y Stevens (2001, p.5) denominan a este nuevo aprendiz “hablante intercultural” es decir, alguien que tiene la capacidad de interactuar con “otros”, aceptar otras perspectivas y percepciones del mundo, mediar entre ellas.
El enfoque intercultural implica una actitud crítica ante la sociedad tal y como viene reflejado en las palabras de Oliveras (2000):
En definitiva, el enfoque intercultural constituye un elemento relevante en el aula de lengua extranjera puesto que permite al alumnado no solo reflexionar desde sí mismo y desde su propia identidad sino también tener una visión positiva de la diferencia como algo enriquecedor para su formación como individuo.
Atienza, J.L. 1997. Sócrates, escuela de alteridad. Revista LOGOI, nº 5, editada por AAPLE. P.91-102.
Bauer, B., Debenedette, L., Furstenberg, G., Levet, S., & Waryn, S. (2006). The Cultura project. In J. Belz & S. Thorne (Eds.), Internet-mediated intercultural foreign language education [en línea]. [citado 12 mayo 2010] Disponible en http://www.personal.psu.edu/slt13/589_s2007/BauerEtAl_2ch_1st.PDF) (p. 31-62).
Bernard, M. 1999. Penser la mise à distance en formation. Paris: L'Harmattan.
Byram, M. 1997. Teaching and Assessing Intercultural Communicative Competence. Multilingual Matters Ltd.
Byram, M., Nichols, A. Y Stevens, D. 2001. Developing Intercultural Competence in practice. London: Multilingual Matters.p.5.
Byram, M.; Gribkova, B. y Starkey, H. 2002. Développer la dimension interculturelle de l’enseignement des langues. Une introduction à l’usage des enseignants. Strasbourg : Conseil de l’Europe.
Corbett, J. 2003. An intercultural approach to English language teaching. London: Multilingual Matters. p.212.
Crawford-Lange., & Lange, D.L. 1984. Doing the unthinkable in the second language classroom: A process for the integration of language and culture. In T.V. Higgs (Ed.), Teaching for proficiency, the organizing principle. ACTFL Foreign Language Education Series: Lincolnwood, IL: National Textbook Company. [en línea]. [citado 30 noviembre 2010]. Disponible en
http://w3.u-grenoble3.fr/epal/pdf/develotte-kern-guichon.pdf. P. 139-177.
Delors, J. 1996. La educación encierra un tesoro. Informe a la UNESCO de la Comisión Internacional sobre la educación para el siglo XXI. Madrid: Santillana. Ediciones UNESCO. p.46.
Furstenberg, Gilberte, Sabine Levet, Kevin English & Katherine Maillet (2001): Giving a Virtual Voice to the Silent Language of Culture: The Cultura Project Classroom Examples ,Language Learning & Technology, nº 1, vol. 5, 55-102 [en línea][citado 2 de mayo 2011] Disponible en:
http://llt.msu.edu/vol5num1/furstenberg/default.html; 02/06/2011].
Guilherme, M. 2000. Intercultural competence. En M. Byram (ed.): Routledge Encyclopaedia of Language Teaching and Learning. London: Routledge.
Guillén, C. 2004. Los contenidos culturales. En J. Sánchez Lobato y I. Santos Gargallo (dirs.) Vademécum para la formación de profesores: enseñar español como segunda lengua (L2) /lengua extranjera (LE), Madrid: SGEL, p. 835-851.
Iglesias, I. 2003. Construyendo la competencia intercultural: sobre creencias, conocimientos y destrezas. Carabela, núm. 54, p. 5-28.
Kramsch, C. 1993. Context and Culture in Language Teaching. Oxford: Oxford University Press.
Lamy, M-N. & Hampel, R. 2007. Online Communication in Language teaching and Learning. Basingstoke: Palgrave McMillan.
Oliveras, A. 2000. Hacia la competencia intercultural en el aprendizaje de una lengua extranjera. Estudio del choque cultural y los malentendidos. Madrid: Edinumen.
Paricio Tato, M.S. 2005. La dimensión cultural en los libros de texto de lenguas extranjeras: pautas para sus análisis. Glosas didácticas nº 15. [en línea]. [citado 9 agosto 2010]. Disponible en http://www.um.es/glosasdidacticas/GD15/gd15-13.pdf.
Pothier, M. 2003. Multimédias, dispositifs d'apprentissage et acquisition des langues, éditions Ophrys, coll. AEM. Archive EduTice. 180-1 [en línea][citado 30 febrero 2011] Disponible en:
http://edutice.archivesouvertes.fr/docs/00/27/51/85/PDF/Multimedia_Dispositifs%28Maguy_Pothier%29.pdf;
Samovar, L.A., & Porter, R.E. 1994. Intercultural Communication: a reader. California: Wadsworth Publishing Company.
Warschauer, M. 1997. Computer-mediated collaborative learning: Theory and practice. Modern Language Journal, 81, p. 470–481.
Zourou, K. 2007. Paradigme(s) émergent(s) autour des apprentissages collectifs médiatisés en langues. Alsic. vol. 10, n° 2, p. 1-26