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dero artista". Lo que eres es un
verdadero imbécil si sales de la
universidad con un ego como
una catedral. La humildad y la
honestidad son las mejores ar-
mas para conseguir trabajar.
En Nebrija tuve que hacer dosmil
cuatrocientas cincuenta y sie-
te presentaciones. Esto, que en
un principio si eres vergonzoso
puede resultar algo tedioso, es
fundamental para encontrar un
trabajo. Si tienes miedo de pre-
sentar un proyecto a tus com-
pañeros de clase, ¿qué pasará
cuando tengas que presentar
una película a 5.000 personas y
la mitad, bolígrafo en mano, es-
peren que cometas algún error
para nutrir las ansias sensacio-
nalistas de este nuestro querido
mundo? Qué dramático ha que-
dado esto... ¡Me gusta!
Nebrija tiene grandísimos pro-
fesores a los que conviene es-
trujar, son nuestro primer con-
tacto con lo que nos espera
fuera. Todos ellos tienen una
amplia experiencia profesional
y, lo creas o no, saben más que
tú. La participación en clase
demuestra las aptitudes de al-
guien que estará motivado a la
hora de desarrollar su carrera
profesional. Ser curioso es una
virtud que muchos perdemos
cuando nos hacemos adultos:
recuperadla ya mismo, mañana
es tarde. La encontraréis entre
los dibujos de parvulario y los
cálculos de primaria.
Una de las cosas que más va-
loro de aquellos seis años uni-
versitarios en Nebrija es que me
dejaron muy claro que el estudio
no se queda en clase o en los
ejercicios. Hay que estar infor-
mado y a la última. Cuando voy a
una reunión con una agencia de
publicidad, me hacen hasta pre-
guntas trampa para saber cómo
de preparado vengo. Siempre
hay que estar al día de todo lo
que sucede en el sector en el
que vais a trabajar. Y no debéis
dejar de aprovechar todas las
actividades que os puedan ha-
cer crecer en el ámbito laboral
y también personal: el Festival
Jóvenes Tocados por la Publici-
dad y el Festival de Cortos AdN
son dos plataformas que me
impulsaron a convertirme en el
profesional que soy hoy. Abren
la puerta a exhibir vuestros pro-
yectos y a conocer a personas
que admiráis y jamás pensabais
tener delante.
Ahora mismo estoy prepro-
duciendo mi primera película
mientras sigo dirigiendo publici-
dad. De hecho, este artículo se
queda aquí porque me meto a
una reunión con unos creativos
de una agencia de publicidad a
los que tengo que convencer de
añadir una propuesta que invo-
lucre a un caza que sale volando
al final de un spot.
Mucha suerte y a luchar por lo
que os apasione.
