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NUESTRA
· ABR 2013 · Nº 4
L
a tasa de actividad empren-
dedora total (TEA) es el indi-
cador principal que elabora
GEM para estimar la proporción
de población de 18-64 años invo-
lucrada en actividades empresa-
riales emprendedoras que, o bien
se están poniendo en marcha (0-3
meses) o están en fase de consoli-
dación (3-42 meses).
Tras haber sufrido una drástica
caída en los primeros años de la
crisis y haber alcanzado un mí-
nimo histórico del 4,3%, la TEA
comenzó a recuperarse en 2011
aumentando hasta un 5,8%. Sin
embargo, esta tendencia crecien-
te no se ha mantenido en 2012; el
indicador ha bajado una décima
y se ha situado en un 5,7%.
La causa de esta disminución
se debe a la elevada mortandad
habida entre iniciativas empren-
dedoras de los años 2010 y 2011,
que no han superado los 42 me-
ses de vida -críticos para conso-
lidarse-, y no al tipo de progreso
de la actividad del año 2012, que
ha experimentado un crecimien-
to interanual de casi un 11%. La
TEA es un índice complejo que
abarca actividades de entre 0 y
42 meses en el mercado, por lo
que, para comprender su evolu-
ción hay que analizar todas sus
componentes.
A pesar de que España todavía
está en una etapa donde la des-
trucción empresarial supera la
nueva creación, hay indicios que
apuntan a que podríamos estar
llegando al final de la misma.
Entre ellos, destaca el aumento
continuado de la tasa de pobla-
ción que manifiesta su intención
de emprender en los próximos
tres años y que alcanza la cifra de
un 12% en 2012. Asimismo, se ha
frenado la proporción de inicia-
tivas motivadas por la necesidad
ante la falta de empleo, que abar-
ca una cuarta parte del empren-
dimiento y que, dada la menor
ambición con que nace, suele
tener menos probabilidades de
lograr una buena consolidación.
Finalmente, la tasa de abandono
empresarial ha disminuido una
décima situándose en un 2,1%.
Para complementar el resultado
bruto de la actividad emprende-
dora es imprescindible propor-
cionar información acerca de las
características y calidad del em-
prendimiento. Los datos del ob-
servatorio español 2012 en cuan-
to a estos apartados arrojan luces
y sombras. Así, en la parte posi-
tiva, la actividad emprendedora
de este año ha mostrado una ma-
yor diversificación que la del año
anterior con una ligera recupera-
ción del sector transformador o
industrial y algo más sustancial
en el de servicios a otras empre-
sas. También resultan alentado-
res los aumentos de porcentajes
de empresas que crean empleo,
que son innovadoras en produc-
to o servicio, que se ponen en
marcha con base tecnológica y
con intensa actividad exportado-
ra. Por otro lado, los indicadores
que han evolucionado a la baja
son los de emprendimiento en
el sector extractivo o primario y
en el orientado al consumo, el de
emprendimiento con uso de tec-
nologías de última generación, el
de competitividad y los de alta
expectativa de expansión en el
principal mercado.
Estos y otros muchos resultados
ofrecidos por el Informe GEM
España 2012 son consecuen-
cia de un entorno hostil para el
emprendedor en que la falta de
financiación, la necesidad de
políticas concretas de apoyo, la
Emprendimiento en España:
Resultados del
Observatorio GEM 2012
INFORME