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EN PORTADA
Marta Saavedra
Directora de Nuestra Nebrija
Profesora de la Facultad de Ciencias de la Comunicación
Enrique Velasco, de la Facultad
de Artes y Letras (Grado en Len-
guas Modernas), Javier Biosca,
de la Facultad de Ciencias de la
Comunicación (Grado en Perio-
dismo), Laura García, de la Fa-
cultad de Ciencias de la Salud
(Grado en Enfermería), Raquel
María de Martín, de la Facultad
de Ciencias Sociales (Grado en
Derecho) y María Estela Asensio,
de la Escuela Politécnica Supe-
rior y Escuela de Arquitectura
(Doble Grado en Fundamentos
de la Arquitectura e Ingeniería en
Diseño Industrial).
Para Carlos Enrique Velasco la
Mención supuso “una gran ale-
gría, un reconocimiento al tra-
bajo realizado durante los cua-
tro años de carrera”. “También,
algo por lo que mis padres, que
tanto sacrificio y esfuerzo han
demostrado, se sentirían or-
gullosos”, relata. Hoy colabora
como traductor y revisor en una
empresa de traducción audiovi-
sual y localización y planea rea-
lizar un máster el curso próximo.
Considera que los valores que
más se tuvieron en cuenta en su
elección fueron la implicación y
la constancia y que la distinción
es una recompensa a una labor
de largo recorrido.
Javier Biosca finaliza su segun-
da titulación, el Grado en Re-
laciones Internacionales, y re-
cuerda que la Mención fue una
sorpresa tanto para él como
para sus familiares. “Me gusta
lo que hago y, si lo hago, tengo
que hacerlo lo mejor que sé; no
puedo hacer un trabajo o estu-
diar un examen a medias”. Así
explica por qué considera que
fue elegido por sus compañeros
y profesores e indica: “Es una
distinción muy reconfortante, no
solo por ser un premio al rendi-
miento académico sino porque
también participan tus amigos”.
“Cuando pronunciaron mi nom-
bre tuve la sensación de que de
verdad había acabado, era en-
fermera. No solo tenía ya una ti-
tulación, sino que además todo
mi esfuerzo había sido recono-
cido y recompensado”, recuerda
Laura García, que considera que
los valores que se premiaron
en su caso fueron “las ganas
de querer hacer las cosas bien,
la dedicación y el esfuerzo”. En
enero realizó el examen EIR y,
actualmente, trabaja en un cen-
tro médico privado.
Orgullo y temblor de piernas fue
lo que sintió en la graduación
Raquel María de Martín cuando
escuchó su nombre. “Cuando
hablé con mi tutora entendí que,
además de haber estudiado,
quisieron reconocer mi impli-
cación como delegada”, resal-
ta la galardonada, que apunta:
“Supongo que lo que destacó
fue estar siempre al corriente
de todo, dispuesta a ayudar e
intentar hacer las cosas más
fáciles a mis compañeros”. La
alumna, que reconoce que des-
de que conoció la existencia de
la Mención se convirtió en una
fuente de motivación, termina
ahora el Grado en Relaciones
Internacionales y prepara en
