NUESTRA
· DIC 2014 · Nº 11
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VISIÓN
NEBRIJA
Es conveniente destacar que
la competencia profesional no
se vincula únicamente a habi-
lidades relacionales complejas
como el liderazgo o la nego-
ciación, sino que existen otros
aspectos más rutinarios que son
igualmente esenciales para un
desempeño eficaz y que, pro-
bablemente, pueden tener más
impacto en etapas laborales
iniciales o ser una de las causas
de una gestión ineficaz en per-
files más elevados (habilidades
de planificación y gestión del
tiempo, adecuación de la comu-
nicación al interlocutor y a la
ocasión, proactividad y autono-
mía en la asunción de responsa-
bilidades…).
En último lugar, la formación en
competencias tiene un compo-
nente experiencial ineludible y
es que el alumno debe poner en
práctica lo aprendido. Si no hay
acción, no hay competencia.
Para ello, los profesores del
Instituto realizan actividades que
reproducen situaciones reales y
ejercicios que permiten estable-
cer itinerarios de acción y revisar
los propios avances. Un elevado
porcentaje del tiempo dentro
del aula se dedica a actividades
prácticas como las dinámicas
de grupo, los ejercicios de roles
o las entrevistas, que deben ser
diseñadas ad hoc según el nivel
y área de especialización del
alumnado.
Todas estas actividades son
explotadas en profundidad por el
profesor, que ha de tener habili-
dades para analizar y gestionar
las dinámicas individuales y gru-
pales. El docente tiene que saber
controlar situaciones inesperadas
y mostrar buenas habilidades de
empatía y comunicación con las
que trabajar eficazmente el com-
ponente emocional. Para ello, es
esencial que sepa posicionarse
como un referente -por conoci-
miento y experiencia-, digno de
confianza.
Una de las herramientas más
empleadas en esta fase es el plan
de acción individual, diseñado
para que el alumno establezca
sus propios objetivos y concrete
los pasos a seguir para alcanzar-
los. Este plan debe detallar, entre
otros aspectos, los recursos nece-
sarios para conseguir los objeti-
vos, los momentos de evaluación
parcial y total del éxito obtenido
y los resultados esperados ex-
presados en indicadores obser-
vables. Esta actividad permite
reflexionar sobre los propios pro-
cesos y resulta muy eficaz para
salir del círculo de comodidad y
desarrollar nuevos patrones de
conducta que permitan alcanzar
metas más ambiciosas.
Maite Uribarri González
Profesora del Instituto Nebrija de
Competencias Profesionales
Sara Castellanos Violero
Profesora del Instituto Nebrija de
Competencias Profesionales
La competencia
incluye
conocimiento,
aptitudes y
actitudes pero
también requiere
poner en marcha
la respuesta más
adecuada según el
contexto en el que
nos encontremos