Nuestra NEBRIJA 24 - Enero 2018 - page 40

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Reportaje
El sistema educativo español
se encuentra en un momento
de cambio esperado tanto por
docentes como por alumnos y
padres. Tras numerosos estu-
dios ha quedado claro que la
forma de educar en las aulas
necesita una regeneración que
se adapte a los nuevos tiem-
pos, a lo que las nuevas gene-
raciones van a necesitar cuan-
do terminen sus estudios.
Javier Pericacho, profesor de
la Facultad de Letras y Educa-
ción, resumeesta ideaafirman-
do que en España, tenemos
“una escuela del siglo XIX, con
docentes del siglo XX y alum-
nosdel sigloXXI”. Esdecir, que
toda la estructura necesita un
cambio, desde los conocimien-
tos impartidos y la forma de
transmitirlos hasta la formación
de los docentes. “No contem-
plar lanecesidadde renovación
constante de la escuela puede
generareldistanciamiento,e in-
clusoel nocumplimientode las
altas expectativasque la socie-
daddeposita en ella”, afirma el
profesor Pericacho, por lo que
hay que entender la educación
como un sistema que evolucio-
na constantemente para adap-
tarse a las necesidades de la
población.
Prueba de todo esto es que
España tiene la mayor tasa de
abandono escolar de toda Eu-
ropa y uno de los principales
motivos que aparece refleja-
do en los estudios es que los
alumnos noencuentranmotiva-
ción ni interés en las clases. La
causa es el modelo de escuela
tradicional que aún se mantie-
ne en las aulas y que no llega
a conectar con los intereses
de los alumnos y no favorece
su desarrollo integral. Lo que
los expertos, y con especial
hincapié los docentes, piden
es “crear una nueva cultura es-
colar” que permita a los estu-
diantes desarrollar habilidades
como la crítica o la creatividad,
entre otras, en contraposición
a la respuesta automática que
el modelo tradicional pide para
solucionar los problemas.
El cambio en el sistema edu-
cativo debe ser respaldado
políticamente e instaurado de
manera homogénea en todos
los centros para poder estar al
alcance de todos los alumnos.
Sin embargo, el Pacto Educati-
vo todavía no ha llegado a un
punto en común entre los par-
tidos políticos y los distintos
agentes del sector educativo
que tienenalgoquedecir, pero,
son muchos los centros que,
individualmente, están cam-
biando su manera de impartir
clase creando nuevas corrien-
tes educativas que “ponen en
valor con su práctica la confi-
guración de una escuela no
solo entendida como contexto
puramente académico, sino
también comomotor demejora
personal, cultural y social”, ex-
plica Javier Pericacho.
Lo que los expertos critican
de la escuela tradicional son
la inmutabilidad y el exceso
de memorización con el que
se imparten los conocimien-
tos que exigen a los alumnos
aprenderse los contenidos sin
la reflexión y el razonamiento
que les resultará más útil pos-
teriormente. Las nuevas escue-
las son más experienciales y
participativas, con una visión
global de la educación y abier-
tas a la comunidad en la que
Unaeducaciónmás
activa y participativa
PaulaMartínez.
Redacción
NuestraNebrija
Las nuevas escuelas sonmás experienciales y
participativas, con una visiónglobal de laeducación y
abiertas a lacomunidaden laque sedesarrollan.
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